El lavavajillas es uno de los electrodomésticos clásicos en muchas casas. Un dispositivo que parece hermano gemelo de la lavadora en lo que a ahorro de trabajo se refiere. No hay que pasar un rato delante del fregadero para limpiar los utensilios de cocina y además lo hace con más efectividad y ahorrando agua.
En casa tenemos uno desde hace casi seis años cuando nos mudamos y pese a todo aún sigue conservando algunas funciones misteriosas. De hecho tengo que reconocer que hay una que no he descubierto hasta hace poco y me ha llamado la atención que poca gente la conoce. Y lo mejor es que ahora tengo más espacio para colocar mejor los utensilios de cocina.
En busca de la palanca escondida
La segunda bandeja, la que por regla general está destinada a colocar vasos, copas y otros elementos no demasiado grandes y pesados, tiene una palanca "secreta" que permite que se puedan colocar por ejemplo copas de mayor tamaño o vasos grandes.
El sistema que emplea es muy sencillo. En la segunda bandeja hay dos palancas, situadas cada una a un lado de la bandeja en la zona más profunda de la misma.
La palanca escondida
Lo que hace es que al empujarla permite que la bandeja se baje sobre la guía, ganando varios centímetros de altura. Y cómo lo mejor es verlo, te dejo con el vídeo que he grabado y en el que se aprecia su funcionamiento.
Es un sistema más sencillo que el mecanismo de un chupete, pero al mismo tiempo es realmente efectivo. Bajo estas líneas puedes apreciar, como queda la bandeja situada en posición elevada sobre el rail.
Posición normal
Para comprobar la diferencia, bajo este párrafo puedes ver como queda al bajar: se sitúa a la altura de la guía. La diferencia es que la copa ahora entra mejor y en vertical.
Posición rebajada
La ventaja de este sistema es que se puede adaptar en altura tantas veces como deseemos. Si no vamos a usarla para copas o vasos altos, siempre podemos tenerla en una posición elevada. Bajarla es tan fácil como apretar las palancas y dejar que caiga la bandeja, por lo que siempre es interesante hacerlo cuando esté vacía y no tenga demasiado peso.
Ni mi madre sabía que esto existía
La copa no tropieza
Y si ya hemos visto cómo baja y cómo sube, ahora vamos a ver un ejemplo práctico. Con una copa se puede haber como cabe perfectamente con la bandeja en posición bajada. Mientras, con la posición elevada, que es la que viene por defecto, tropieza con la bandeja para cubiertos.
La copa no entra
Para que vuelva a su posición normal, tan solo hay que volver a apretar las palancas y tirar de la bandeja de arriba hasta que oímos el clic en ambos lados indicando que las palancas han quedado fijadas.
Se trata de un sistema que poseen varios lavavajillas de la marca Bosch, aunque también lo he visto en modelos de otras empresas. Una solución para ampliar la capacidad de carga con un simple gesto.
Es una gran ayuda a la hora de optimizar el espacio interior cuando hay que poner el lavavajillas y vamos algo justos de sitio.
En Xataka SmartHome | Es posible ahorrar al usar el lavavajillas. La clave está en cómo colocamos las cosas dentro
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