No por ser un tema conocido, deja de arrojar sorpresas. El verano y los mosquitos son dos elementos que van de la mano. La llegada de las altas temperaturas incrementa la presencia de este insecto, algo que resulta especialmente molesto en nuestras horas de descanso.
Hemos visto trucos de todo tipo: sistemas y métodos caseros para acabar con el zumbido que puede hacernos perder horas de sueño. A todo lo que ya hemos repasado, sumamos ahora los que para la OCU son los mejores antimosquitos que podemos usar en verano.
El combate del verano
Imagen | Departamento de Agricultura de los Estados Unidos
La OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) elabora de nuevo uno de sus conocidos estudios y en esta ocasión se centra en buscar los mejores sistemas para combatir al mosquito y su picadura. De hecho, el estudio asegura que "en 8 de cada 10 hogares se usa un remedio antimosquitos". Para la elaboración de este estudio, se ha preguntado a más de 1.400 personas con edades comprendidas entre los 25 y los 79 años, con el fin de abarcar el mayor espectro posible de la población.
Con todos estos datos, el resultado es que casi un 80% de los encuestados tienen en su casa un sistema antimosquitos. Eso, dentro del domicilio, puesto que esta encuesta, trasladada al exterior, rebaja la cifra a solo un 45% de personas usando un repelente para este insecto.
Respecto de los sistemas más usados, un 42% de los encuestados emplea mosquiteras y más de una tercera parte hace uso de los clásicos enchufes y difusores. Para el exterior, lo normal es recurrir a repelentes en spray, seguido de cremas y pulseras "espantamosquitos".
Los más y menos eficaces para los usuarios
Imagen | Pixabay en Pexels
Además, en el estudio han preguntado a los usuarios cuál es el sistema que consideran más eficaz a la hora de combatir a los mosquitos. En este sentido, las mosquiteras ocupan el primer puesto en lo que a eficacia se refiere, seguidas de los difusores y enchufes antimosquitos. Llama la atención los últimos puestos que ocupan las lámparas de luz y los emisores de ultrasonidos.
Según los expertos, el mejor método para combatir los mosquitos dentro de casa es usar insecticidas, ya sea en formato spray o aerosol. También resulta muy práctico el uso de los clásicos enchufes con difusores.
A favor de los productos insecticidas, destaca que son efectivos y rápidos. La desventaja es que hay que dejar la habitación cerrada para que sean efectivos y que además pueden resultar tóxicos, por lo que su empleo debe ser comedido. En este sentido, hay que evitarlos si hay bebés en casa.
En cuanto al uso en el exterior, la mejor alternativa pasa por usar repelentes, y en este sentido afirman que los más eficaces son el DEET (N,N-dietil-m-toluamida) y la Icaridina (derivado de la pimienta). Ambos son tóxicos, aunque el segundo un poco menos. En el caso del primero, puede además interferir con las cremas solares.
Le siguen el Citriodiol o el PMD y, como precaución, no deben usarse en niños. En este caso, son menos eficaces, por lo que tendrán que aplicarse en más ocasiones para que resulten efectivos.
Para los que buscan repelentes menos tóxicos, están el IR 3535 (Butilacetilaminopropionato de etilo) y los aceites esenciales (geraniol, citronela y otros). Son menos eficaces, pero a cambio tienen menos toxicidad para las personas.
Por último, y para usar en el exterior, hacen referencia a las pulseras repelentes. El sistema menos efectivo, puesto que el alcance del principio activo es muy limitado.
Lo que peor funciona como se puede ver, todos estos métodos se basan en el empleo de sustancias químicas y no aparece la tecnología por ningún lado. Y es que, según la encuesta, las lámparas de luz ultravioleta y los sistemas de ultrasonidos no son eficaces.
Ninguno de estos métodos, afirman, hacen que los mosquitos se distraigan: "no se sienten atraídos por la luz, sino por el CO2 de la respiración y las sustancias liberadas por la piel".
Sí al ventilador
Además, hacen mención a un sistema que ya hemos comentado en un artículo. Se basa en utilizar el ventilador como sistema para ahuyentar a los mosquitos. Y es que este método, por una parte, impide que un mosquito se pose en la piel humana. El motivo es que, para posarse en nuestra piel, el mosquito necesita que la velocidad del aire no supere los 1,5 metros por segundo (5,4 km/h). A esta velocidad, el mosquito no puede mantener el vuelo estable y, por lo tanto, no puede posarse con éxito.
Además, por otro lado, el ventilador se encarga de mover el aire, algo que incide en el ambiente. Al mover el aire, dispersa el CO2 (dióxido de carbono) de la respiración y las sustancias liberadas por la piel (entre ellas, el ácido láctico) y el olor a sudor, factores que atraen al mosquito hacia nosotros.
El sistema antimosquitos ideal
Imagen | JumpStory
Viendo todo esto, se puede observar que casi todos los métodos tienen ventajas pero también inconvenientes. Por eso, podríamos establecer una serie de requisitos que debería tener el mejor repelente para mosquitos:
- Tendría que ser de origen natural y de características volátiles.
- Que tuviese una eficacia prolongada en el tiempo.
- Que funcionase con mosquitos y otros insectos.
- Que no sea tóxico para personas, animales y plantas.
- Que no irrite la piel.
- Que sea resistente al roce y al agua.
- Que sea inodoro y que no deje restos en ropa o piel.
Más información | OCU
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