Decoran, mejoran el aire y aíslan y hacen que ahorremos energía y euros. El truco es usar jardines verticales

Con la llegada de los fríos invernales, nos hemos esforzado en buscar soluciones para mejorar el aislamiento en casa. Hemos visto desde sistemas tradicionales que hemos probado al uso de cortinas y estores que completen a los sistemas de climatización. Y ahora vamos a ver una nueva propuesta.

Se trata de usar plantas y vegetación para lograr un buen aislamiento térmico en nuestra vivienda y hacerlo además sin tener que realizar un desembolso importante en energía, ya sea electricidad o luz. Y es que contar en la fachada con jardines verticales, permite mejorar el aislamiento, sirviendo como elemento que frena la pérdida de frío o de calor por las fachadas.

Aísla y decora

Ya sabemos como el uso y el empleo de plantas, contribuye a mejorar la decoración en casa, a la vez que ayuda a limpiar y purificar el aire que respiramos. Lo que quizás muchos no saben es que el empleo de jardines verticales también sirve para mejorar el aislamiento en nuestros hogares y edificios.

Según un estudio llevado a cabo en la Universidad Politécnica de Madrid, se establece una relación entre el uso de jardines verticales en las fachadas y la mejora en el aislamiento de los edificios. De esta forma se garantiza una independencia térmica del hogar respecto del exterior.

Estos investigadores "ha llevado a cabo un estudio para determinar la relación entre el espesor del aislamiento térmico de los edificios y el rendimiento energético de los jardines verticales colocados en sus fachadas" y han demostrado que estos jardines verticales pueden funcionar a modo de aislante para mejorar el enfriamiento, siempre y cuando la fachada esté moderadamente aislada, lo que significa que debe tener un espesor de aislamiento de 9 cm, por encima del cual su efecto ya no se nota.

Para que no lo sepa, un jardín vertical se trata de una estructura formada por plantas capaces de vivir en superficies verticales. Plantas que permiten usar sus raíces como soporte y que pueden vivir con poco sustrato. Normalmente son de la familia de las epífitas y puede que ñas hayas visto en balcones y fachadas.

De hecho, cada vez más se usan en fachadas de edificios con el objetivo de reducir el calentamiento provocado por el sol y la dispersión de energía a través de la envolvente de los mismos. Pero además de en las fachadas, también podemos colocar un pequeño jardín vertical en casa a pequeña escala.

Además de mejorar la climatización en el hogar, logrando una mayor independencia térmica, un jardín vertical, ofrece también un aislamiento acústico del exterior, mejora la calidad del aire, acabando con partículas nocivas y convirtiendo el CO2 en oxígeno y da un toque decorativo.

A la hora de montar un jardín vertical en casa pero a nivel más terrenal (nada de cubrir la fachada del bloque), tendremos que tener en cuenta el tamaño de la superficie en la que lo vamos a colocar, pues en función del mismo dependerá el precio a pagar. Además, tendremos que tener en cuenta el tipo de plantas que vamos a usar y los sistemas de riego y de desagüe.

Hay que hacer un estudio para determinar dónde vamos a colocar el jardín vertical, si es en el interior o en el exterior, pues en función de la ubicación tendremos que elegir las plantas que lo formarán. Así para interior lo ideal es elegir especies que funcionen en condiciones de poca luz o incluso en la sombra, mientras que para exteriores las plantas elegidas deben ser resistentes a las inclemencias del tiempo.

Opciones para montar un jardín vertical

El primer ejemplo que vamos a analizar es este modelo que hemos encontrado en Amazon. Sirve para crear un jardín vertical en muy poco tiempo, ya sea en la terraza, en el balcón o en el patio. Con capacidad para 15 plantas, tiene suministro de agua invisible y está a un precio de 106,72 euros.

Si lo tuyo son las macetas y quieres aprovechar que ya tienes en casa, puedes usar este modelo que venden en Miravia. Por poco más de 33 euros tienes un macetero vertical de plástico en color antracita de 68,5 (largo) x 19 (ancho) y 54,6 centímetros de alto.

Un modelo aún más económico y además sostenible es este de Amazon. Un macetero en fieltro para colocar en el balcón o terraza con capacidad para 36 bolsas en las que plantar una amplia variedad de plantas. Cuesta 17,99 euros en Amazon en color verde o 26,99 euros en color negro.

En Leroy Merlin tienes este macetero vertical para colocar en la pared. Por 22,49 euros es un sistema modular de macetas de balcón que se puede usar tanto en interior y exterior. Está equipado con sistema de reserva de agua, para garantizar un riego duradero a las plantas.

IKEA también está presente en este listado con el ASKHOLMEN. Por 29,99 euros. Se trata de una celosía que se puede colgar en cualquier pared para que sirva de base a plantas trepadoras. El enrejado se puede montar en vertical o en horizontal, y regular la altura. Y en la parte inferior, se puede colocar un macetero o jardinera que lo complemente como esta, a un precio de 39,99 euros.

Antes de llegar a la última propuesta, toca ver esa estructura de madera que se puede colocar tanto en interiores como en exteriores. Tiene tres maceteros de madera maciza que se pueden mover a tu gusto y la puedes encontrar en Amazon por 95,95 euros.

En una escala superior en precio encontramos en Amazon esta estructura vertical. Cuesta 544 euros y se puede usar para decorar la terraza, una pared del jardín o el balcón. Es una jardinera elevada con orificios de drenaje, macetero de madera para trepar y contenedor vertical para plantas de interior y exterior.

Imagen interior | Francesca Oliveri