Cuando queremos climatizar la casa, una de las dudas que pueda asaltar a los usuarios es la relativa a la situación de los radiadores. Éstos aparatos que son los encargados de distribuir el calor en las habitaciones y por lo tanto en la casa, no se pueden colocar en cualquier lugar si queremos que ofrezcan el mejor rendimiento.
Y es que la ubicación de los radiadores (al igual que el mantenimiento) en una casa, es importante para lograr una distribución eficiente del calor y un ambiente cómodo. Por eso vamos a ver dónde es mejor ubicar los radiadores, incluso en diferentes habitaciones de la casa, para lograr la mejor relación consumo y rendimiento.
Bajo la ventana, el mejor lugar
Por regla general, la ubicación ideal del radiador en cualquier estancia no es otra que bajo la ventana. El objetivo es aprovechar la circulación del aire. Como el aire caliente siempre sube, este lo que hace es empujar el aire frío que entra por la ventana hacia el techo y así crea una especie de corriente de convección cíclica que reparte el calor de forma rápida y homogénea.
De esta forma, además de ahorrar en calefacción, lo que se consigue es mejorar el confort térmico en casa, ya que se favorece la distribución del calor por toda la habitación.
Si por cualquier motivo, es imposible colocar el radiador bajo a la ventana, el mejor lugar para ponerlo es el que se encuentre lo más cerca posible de ella.
Otra solución es colocar los radiadores en las paredes interiores que son las que hacen de separación en el piso. El objetivo es que el calor que se pierde por la pared, sirva para caldear la habitación contigua y así aprovechar el calor que transmiten a las paredes.
En caso de no tener más remedio que colocar el radiador en una pared que da al exterior o que linda con otro piso, se puede optimizar el funcionamiento fabricando un aislante casero, como ya vimos, para que impida que el calor se pierda por la pared.
Distintas habitaciones
Si el radiador está en el salón o sala de estar o en un dormitorio y no se puede colocar bajo la ventana, puedes situar el radiador en una pared larga y libre de obstáculos para permitir una distribución uniforme del calor.
Además es importante que el radiador esté cerca de la zona donde pasas más tiempo en la habitación, generalmente cerca de la cama, pero sin que esta se encuentre directamente frente al radiador para evitar corrientes de aire caliente incómodas mientras duermes.
Por regla general y en la medida de lo posible, hay que evitar colocar muebles, sillas, el sofá o cortinas frente al radiador, ya que pueden bloquear la circulación del aire caliente.
En la cocina, asegúrate de que el radiador no esté demasiado cerca de áreas de preparación de alimentos como hornilla, vitro, horno... para evitar problemas de seguridad y como antes, colócalo en una zona donde sea menos probable que los muebles o electrodomésticos obstruyan la salida de calor
Si quieres colocar un radiador en el baño, un lugar en el que no suele haber ventanas, puedes aprovechar los modelos toalleros para que de camino te ayuden a secar la ropa. Además, puedes situarlo cerca de la zona donde te vistes o te secas después de la ducha para mantener la sensación de confort en el baño pero con la precaución de alejarlo lo suficientemente de fuentes de agua para evitar daños por humedad.
Además y aunque pueda resultar tentador en el apartado estético, no es aconsejable pintar los radiadores, puesto que las capas de pintura empleadas, lo que hacen es dificultar la transmisión del calor y además pueden producir olores desagradables.
Recuerda que la elección de la ubicación exacta de los radiadores puede variar según el diseño y la disposición de tu casa. Siempre es aconsejable consultar con un profesional de la calefacción para asegurarte de que la instalación de los radiadores cumpla con la normativa y regulaciones y para garantizar una distribución óptima del calor en tu hogar. También es importante purgar los radiadores periódicamente para eliminar el aire atrapado en el sistema y mantener su eficiencia.
Imagen portada | Maria Orlova
En Xataka SmartHome | Mi casa tiene pocos radiadores y son pequeños: con estos dos sencillos cambios he logrado que calienten más y ahorrar en la factura