Muchas veces habrás oído que tener un móvil en el bolsillo está asociado a una pérdida de la privacidad. Pero aunque el móvil es el elemento que por excelencia asociamos con la exposición de nuestros hábitos de vida, hay muchos más dispositivos que tienen acceso a información privilegiada.
Uno de estos elementos el el televisor. Nada de caja tonta y ahora ya los llamamos Smart TV (a no ser que usemos el modo básico). Dispositivos con conexión a la red de forma permanente, ya sea por WiFi o cable, acceso a todo tipo de apps, geolocalización e incluso con micrófono y cámara para tenernos vigilados estar atentos a nuestras peticiones. Por eso es interesante controlar algunos parámetros para que nuestra Smart TV no sepa más de lo que debería y que siga funcionando correctamente.
La importancia de estar protegidos
Y es que configurar tu Smart TV para aumentar la privacidad implica tomar ciertas precauciones y ajustes en la configuración. A continuación, te proporciono algunos pasos que puedes seguir para mejorar la privacidad en tu televisor con sólo modificar algunos ajustes.
Y dicho esto, el primer paso lo tienes que dar en el router. Es el dispositivo por excelencia que sirve de puerta al hogar conectado es el primer punto que debes vigilar. Mantén el firmware actualizado, cambia la clave y usuario para acceder al router que viene por defecto y establece una clave fuerte para la red WiFi. Es sólo el principio.
Luego en la Smart TV puedes desactivar la recopilación de datos. Muchos televisores inteligentes recopilan datos sobre tus hábitos de visualización para ofrecer contenido personalizado y publicidad dirigida y de hecho ya hemos visto como puedes indicar tus preferencias de visualización.
Puedes desactivar esta función en la configuración del televisor. Busca opciones relacionadas con la privacidad y la recopilación de datos y asegúrate de desactivarlas.
En resumen, se trata de acceder a distintas opciones para configurar diferentes parámetros que afectan a la seguridad en nuestro dispositivo, entre ellas, aquellas que permiten el acceso a nuestros datos personales por parte del fabricante.
El primer paso es crear una cuenta segura para "trabajar" con el televisor. Una cuenta de correo electrónico con una contraseña robusta para poder configurar distintos parámetros y en caso necesario, tomar el control de la Smart TV.
Y lo mismo que con el router, actualiza el firmware del televisor. Aunque en el mercado de los televisores, las actualizaciones de firmware no son tan frecuentes como en otros dispositivos como los móviles, es importante comprobar de forma periódica si hay alguna pendiente.
Y es que este aspecto es importante para corregir vulnerabilidades de seguridad y mejorar la privacidad. Verifica si hay actualizaciones disponibles para tu televisor y asegúrate de tener la versión más reciente instalada. Y si es posible, configura las actualizaciones para que se lleven a cabo automáticamente.
No es lo normal, pero si no quieres o no te hace falta tener la tele conectada, puedes desconectar el televisor de Internet. No te va a importar si no necesitas acceder a funciones en línea o aplicaciones de streaming, considera desconectar tu televisor de Internet por completo. Esto evitará que envíe datos de seguimiento a los servidores del fabricante.
A la hora de instalar aplicaciones, confía sólo en las que se pueden descargar desde las tiendas de aplicaciones oficiales. En este sentido lo ideal sería revisar las políticas de privacidad de cada una de ellas, pero como no suele ser lo habitual, puedes asegurarte de ajustar la configuración de privacidad dentro de esas aplicaciones si es posible eliminando permisos innecesarios.
En algunos modelos de televisores, la Smart TV tiene una cámara incorporada para videoconferencias, para reconocimiento facial o para usarla con gestos. Si no utilizas estas funciones, puedes optar por cubrir la cámara.
Para hacerlo en algunos modelos puedes quitar directamente la cámara o también puedes mover la pestaña que la desactiva o taparla con una pegatina o un trozo de cinta adhesiva para mayor privacidad.
También hay que tener en cuenta que muchos mandos a distancia cuentan con micrófono para acceder al asistente virtual de turno. Podemos desactivar la función de escucha de nuestro dispositivo o gestionar los permisos que damos a las aplicaciones para que accedan al micrófono.
Si deseas utilizar el navegador en tu Smart TV, evita webs que no dispongan de un sistema de cifrado seguro (HTTP) y aquellas sin certificado digital. Del mismo modo, recuerda no guardar claves en el navegador web para evitar poner en peligro tus cuentas, si el dispositivo fuese atacado.
Finalmente, ante la duda, no hagas clic en cualquier ventana o mensaje que te pueda aparecer, contrasta la información antes de realizar una acción de la que no estés seguro.
Recuerda que la configuración y las opciones pueden variar según la marca y el modelo de tu televisor. Consulta el manual del usuario o visita la web del fabricante para obtener instrucciones específicas sobre cómo ajustar la configuración de privacidad de tu televisor.
En Xataka SmartHome | Cómo bloquear el micrófono de tu Smart TV si te preocupa la privacidad, para que Google Assistant no escuche todo lo que dices