Desde hace unos años hemos visto una gran evolución en los auriculares y sistemas de sonido inalámbricos, con mejores conexiones, mayor calidad de audio, y características innovadoras que nos ayudan en el día a día. Una de ellas es la cancelación de ruido activa, o ANC, la cual se suele incluir sobre todo en auriculares Bluetooth de gama media y alta.
En este artículo nos centraremos en explicar qué es y cómo funciona esta tecnología que tantas vidas ha salvado a la hora de escuchar música fuera de nuestra casa.
¿Qué es la cancelación de ruido activa?
La mejora del aislamiento sonoro ha sido siempre uno de los principales objetivos en los sistemas de sonido. En lo que respecta a los auriculares, aquellos con un diseño más hermético a través de distintas técnicas, como almohadillas de calidad, o una estructura más adaptada a nuestros oídos, suelen ofrecer un buen aislamiento. No obstante, las técnicas mencionadas son 'pasivas', minimizando el impacto del ruido ambiente a través del propio diseño de los auriculares.
Una de las características más demandadas de los auriculares inalámbricos es la 'Cancelación de ruido activa', la cual a través de una serie de procedimientos, donde entran en juego tanto hardware como software, permite minimizar lo máximo posible el ruido de nuestro entorno, para centrarnos únicamente en el contenido que estemos escuchando en ese momento. Su funcionamiento se basa en la teoría de interferencias de ondas.
¿Cómo funciona la cancelación de ruido activa?
Imagen: Tom Connell
La cancelación de ruido activa es una prueba de que el principio de superposición de la teoría de ondas se cumple. En él se señala que cuando dos o más ondas inciden en un punto, la onda total se define como el vector suma de todas las ondas incidentes. De esta manera, se puede crear una onda artificial a través de lo que se conoce como interferencia destructiva, que tiene por objetivo desarrollar una onda de fase opuesta a la señal que recibimos, y que de esta forma, la resultante de su suma sea cero.
En la práctica, la onda total que se origina a partir de esta señal opuesta no es totalmente nula, pero logra atenuar en gran medida el ruido externo que pasa a través de nuestros oídos. La eficacia del ANC dependerá de la calidad del sistema que se incorpore en los auriculares.
Para captar el ruido externo, los auriculares hacen uso de todos los micrófonos. Esta información es vital para que el sistema reconozca qué ruido debe de 'anular' para continuar con su labor y generar así una onda de fase opuesta. Esta onda la genera un circuito electrónico independiente, encargado de analizar la información procedente de ese ruido externo. Los auriculares con ANC más avanzados cuentan con un procesador dedicado para la realización de estas funciones.
Se notará aún más la eficacia de unos auriculares con cancelación de ruido activa en frecuencias bajas y constantes, como el ruido de un motor de avión, coche, tren, o el zumbido de equipos informáticos y ventiladores, entre otros. El sistema puede reducir el nivel de ruido en más de 25 o 30 dB. Además, este sistema, aunado a las técnicas pasivas de cancelación, como unas buenas almohadillas, se conseguirá en conjunto un gran aislamiento sonoro.
Disponer de unos buenos auriculares con cancelación de ruido activa, significa también que podremos escuchar música, un podcast, o cualquier otro contenido, sin la necesidad de subir el volumen y dañar así nuestra audición, ya que se encargarán de disminuir el ruido externo.
Hoy día, tanto para auriculares inalámbricos supraaurales, como intraaurales, disponemos también de aplicaciones móviles que incluyen como característica la activación y desactivación de esta función. Además, en algunos modelos podemos encontrar un comportamiento inteligente de esta característica, aumentando o disminuyendo la cancelación según las condiciones en las que nos encontremos.
Inconvenientes de la cancelación de ruido activa
Si bien os hemos comentado todas las bondades de estos sistemas, la cancelación de ruido activa también posee una serie de inconvenientes que cabe la pena mencionar.
Hay que tener en cuenta que, generalmente, utilizar el sistema de cancelación de ruido activa de nuestros auriculares consume más batería. Como recomendación, sería ideal utilizar el sistema únicamente cuando de verdad lo necesitemos, y no tenerlo siempre activado. Así, la batería de nuestros cascos inalámbricos se resentirá menos.
Otro de los puntos que más debate generan es la calidad del sonido. Y es que a veces, activar la cancelación de ruido genera imperfecciones en la señal, haciendo que la calidad del propio sonido se altere. En algunos sistemas, al activar la cancelación de ruido se amplifican los bajos para que dicha alteración pase algo más desapercibida.
Dependiendo de los auriculares que escojamos, el descenso en la calidad de sonido se notará más o menos. Al final, dependerá de nosotros lo que consideremos mejor en nuestro día a día, si un buen aislamiento, o una mejor calidad de sonido.
Sin duda el inconveniente más obvio pasa por nuestros bolsillos. Y es que aquellos auriculares que cuenten con un sistema de cancelación de ruido activa, serán por norma general más caros. Dependiendo de su eficacia, el precio se verá más o menos incrementado.
Por ejemplo, a día de hoy, algunas opciones que podemos encontrar en las gamas medias del mercado y que incluyen esta tecnología de cancelación activa del ruido son modelos como los Sony WH-1000XM4, los Apple AirPods Max, o los Bose Noise Cancelling Headphones 700, entre otros.
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