Estás pensando en montar un sistema de cine en casa y te asaltan las dudas. ¿Home Cinema o receptor A/V más altavoces? ¿Gama de entrada o gama avanzada? Y una vez has elegido... ¿que método de conexión uso? Si pensamos que no has escogido la conexión sin cables de la que por ejemplo presumen los modelos de Loewe lo más normal es que tengas varias alternativas.
Cable coaxial (S/PDIF) o una conexión óptica (EIAJ-TosLink) son los más habituales pero no ofrecen las mismas prestaciones si bien esto no quiera decir que no tengan entre ellos muchas semejanzas. Vamos a ver cuales son las diferencias y similitudes para que elijas la conexión que mejor se adapta a tus necesidades.
La principal diferencia entre coaxial (el modelo analógico, puesto que hay otro digital) y óptico es el material que usan para enviar la señal. Mientras el coaxial usa cobre logrando una impedancia de 75 ohmios, el óptico usa fibra de cristal u otros componentes similares. Y además por fuera son totalmente distintos.
El cable coaxial analógico es muy fácil de identificar a simple vista. Es ese cable rojo y blanco que figura junto a la clavija amarilla o también junto a la roja, verde y azul del cable de componentes. Las dos conexiones, blanca y roja tiene su correspondiente salida y entrada por colores en los dispositivos compatibles.
El cable óptico sin embargo es mucho más discreto y no vamos a notar la diferencia a no ser que quitemos la capucha protectora que posee. En ese momento veremos la salida o entrada (son lo mismo) en la que se aprecia la fibra de cristal y si ya lo tenemos conectado en un extremo veremos la luz roja que los caracteriza.
Ventajas del cable óptico
En el cable coaxial vamos a encontrar una capa plástica que rodea una malla de cobre con una clavija al final con un cilindro central que es el encargado de transmitir la señal. En formato analógico permite no obstante transmitir sonido de calidad e incluso ofrece la posibilidad de crear un sistema 5.1.
Mientras en el cable óptico la señal circula por medio del uso de la luz. Este cable se basa en impulsos de luz y así la señal viaja en formato digital de un dispositivo a otro logrando un sonido de más calidad y sin perdidas.
Como habrás visto, el cable coaxial hace uso de dos conexiones para cada altavoz mientras que en el cable óptico solo tiene una conexión y con ella podremos enlazar más de un dispositivo. De esta forma se gana en limpieza en la instalación al no toparnos con una maraña de cables y sobre todo vamos a obtener una mayor durabilidad pues el cable óptico es más resistente y menos propensos a un fallo.
Otra de las ventajas que ofrece el cable óptico es que este no se puede contaminar con frecuencias externas como de radio o interferencias electromagnéticas. Si el conector es bueno y el cable también es muy seguro que no será fácil que se contamine con campos electromagnéticos indeseados.
Ventajas del cable coaxial
Junto a estas ventajas, el cable coaxial tienes varias, entre las cuales destaca por un lado el precio, pues su uso es más económico que el óptico y por otro lado el hecho que el coaxial permite transmitir una gama mas extensa de frecuencias por segundo.
Además el coaxial es compatible con las cadenas de bits estándares IEC61937 e incluye el audio multicanal en MPEG-2, AC3 -o Dolby Digital- y DTS. Además las distancias mayores son un problema en el óptico ya que a ser por luz no permite la creación de ángulos cerrados y distancias superiores a los dos metros mientras que el el coaxial asegura una transferencia adecuada en tiradas de hasta 10 o 15 metros.
Por lo tanto la diferencia entre ambos es básicamente el sistema de transmisión, variando de la forma eléctrica a la óptica, si bien la información transmitida es la misma. Es cuestión que cada usuario elija el que más se acomode a sus necesidades en cada momento partiendo de la base que cada uno ofrece ventajas y desventajas. La solución perfecta sería una combinación entre ambos pero eso por ahora no existe...
El HDMI al rescate
Estos dos tipos de cables son los que siempre hemos usado y muchos equipos aún dan la opción de poder "funcionar" con ellos. Sin embargo con el tiempo hemos asistido a la estándarización de otro modelo, el HDMI. Una tipología de la que hemos visto ya un buen número de versiones con especificaciones que no dejan de crecer.
Y es que con el HDMI vamos a tener soporte para conectar aparatos multimedia de todo tipo como pueden ser una consola, un reproductor Blu-Ray, un Home Cinema... ofreciendo en un mismo conjunto la transmisión de vídeo hasta en 4K y permitiendo incluso configuraciones en más de 5.1 canales con formatos en HD.
En Xataka SmartHome | Si vas a comprar un Smart TV esto es todo lo que debes saber sobre las posibles conexiones
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