Muchos aficionados a la música están convencidos de que existe una gran diferencia entre la calidad de sonido de unas fuentes digitales y otras (reproductores de CD, Blu-ray Disc, etc.), y también de que esta misma circunstancia se da en los amplificadores. Otros, sin embargo, defienden que, de existir, son inapreciables.
Ambas posturas son muy respetables, y están íntimamente ligadas con la forma en que cada uno vive su afición. Sin embargo, existe un escenario en el que unos y otros suelen estar de acuerdo. Y es que es relativamente sencillo percibir diferencias cualitativas entre varias cajas acústicas, sobre todo si son de distinto nivel o utilizan una tecnología diferente (electrodinámicas, electrostáticas, de bocina, con tweeters de cinta, etc.).
Alta tecnología al servicio del sonido
Los procesos de diseño y construcción de una caja acústica capaz de ofrecernos un sonido de la máxima calidad (detallado, dinámico, con una escena sonora amplia, rico en matices...) son complejos. Grosso modo, el recinto debe ser lo más rígido e inmune posible a cualquier vibración, que introduciría coloración y distorsión en el sonido.
Los altavoces tienen que ser capaces de restituir el espectro de frecuencias que les ha sido encomendado con la máxima precisión posible, y, a la par, introduciendo la mínima distorsión. Y el filtro divisor de frecuencias debe responsabilizarse de la coherencia acústica de la caja, consiguiendo que cada altavoz trabaje en el dominio de frecuencias en el que «se siente cómodo».
A caballo entre lo artesanal y lo industrial
Si tenéis curiosidad y os apetece conocer la complejidad que entraña la fabricación de una caja acústica de alta gama, echad un vistazo al vídeo que ilustra este post. En poco más de tres minutos comprobaréis cómo los operarios de Bowers & Wilkins ponen a punto las cajas acústicas de su serie de referencia, la gama 800 Diamond.
Impresiona la meticulosidad con que trabajan y la tecnología que utilizan. No obstante, B&W no es la única empresa que ha alcanzado este grado de perfección en el proceso de fabricación. Otras compañías, como Dynaudio, Raidho Acoustics, KEF, Wilson Audio o Focal, entre otras, ofrecen cajas acústicas con un nivel de prestaciones y un rigor similares.
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