Thonet & Vander Rätsel BT, análisis

El mundo de los altavoces compactos de escritorio ha evolucionado mucho en los últimos años. De los primeros modelos pequeños, de plástico y con sonido pobre hemos pasado a equipos potentes y versátiles que pueden rivalizar en calidad y funciones con otros sistemas más grandes diseñados para HiFi o cine en casa.

Uno de estos equipos de nueva generación es el conjunto Rätsel BT, un sistema de altavoces 2.1 de la marca alemana Thonet & Vander, quizá poco conocida en España, pero que lleva tiempo ofreciendo sus productos en Europa y también se ha hecho un importante hueco en el mercado americano. ¿Qué nos ofrecen?, ¿qué tal se han comportado en las pruebas? A continuación tenéis nuestro análisis.

Rätsel BT: Presentación, diseño y características

Nos encontramos ante un sistema de sonido estéreo con refuerzo para las frecuencias graves a través un subwoofer que comparten tanto el canal derecho como el izquierdo (configuración 2.1) y que nada más abrir la caja nos damos cuenta de que está formado por 4 grandes elementos.

El primero es el subwoofer, con unas dimensiones de 253 x 253 x 365 mm alberga en su interior un driver de 6,5 pulgadas que según las especificaciones le permiten bajar hasta frecuencias de 30 Hz gracias a la configuración bass-reflex con salida de aire trasera.

Es, sin duda, el elemento más grande del conjunto. Está construido en madera de densidad media, acabado en color negro y resulta bastante robusto, con apariencia de estar bien fabricado. Su parte delantera está gobernada por una gran rejilla metálica que protege al altavoz de posibles golpes y que le da un aspecto bastante elegante.

En su parte trasera nos encontramos un conector de pestaña para los cables de sonido que irán al siguiente gran módulo del conjunto, el amplificador/receptor de sonido, y la salida de aire del puerto de graves.

Este amplificador está diseñado para que podamos instalarlo tanto en vertical como en horizontal. Está cubierto por una carcasa de plástico duro que parece metal, pero que al tacto se nota que es plástico, de buena calidad sí, pero plástico.

Es bastante ligero y tiene en su parte frontal los grandes controles para el volumen, los graves, agudos, un botón para apagar el sonido (mute), una salida de auriculares, una entrada auxiliar (de 3,5 mm) y un pequeño display que muestra la entrada de audio en uso.

En su parte trasera nos encontramos con dos entradas analógicas de tipo RCA, las salidas de audio hacia los altavoces satélite y el subwoofer con conector de tipo pestaña, y un interruptor para apagar el equipo por completo, algo que siempre es de agradecer.

¿Qué potencia ofrece? Pues en las especificaciones marca un total de 72 vatios RMS repartidos de la siguiente forma: 32 vatios para el subwoofer y 20 vatios para cada uno de los altavoces satélites. Estos últimos son bastante compactos, con un tamaño de 253 x 100 x 111 mm, también de madera y con un aspecto externo que aparenta bastante calidad.

Al igual que el subwoofer están blindados magnéticamente, por lo que podremos colocarlos junto a un monitor antiguo sin problemas de interferencias. En su interior nos encontramos un sistema de dos vías formado por un driver para frecuencias medias de 3 pulgadas y un tweeter de 0,5 que se encargará de las agudas, llegando hasta los 20 KHz.

En el interior de la caja de los Rätsel BT nos encontramos también con dos cables de alimentación (uno para enchufes con tres tomas), tres cables para conectar los altavoces al amplificador, un cable RCA para conectar a la fuente de sonido y un pequeño mando a distancia que aparentemente viene sin pila (de botón).

También hay que señalar que el equipo de sonido Rätsel BT es compatible con la transmisión de música a través de un enlace Bluetooth (supongo que de ahí el "BT" del nombre, ya que la marca vende otro producto similar sin esta función) a distancias de hasta 10 metros y permite el emparejamiento rápido si contamos con un terminal móvil con NFC.

Entorno y temas para las pruebas

Todas las pruebas han sido realizadas en una sala de unos 12 metros cuadrados con los típicos muebles que todos tenemos en casa, sin aislamiento acústico dedicado y a una distancia de audición de entre 1,5 y 3 metros. Nuestra fuente de audio será un ordenador con tarjeta de sonido Asus Xonar Dx.

Para comprobar las posibilidades del equipo hemos optado por reproducir diferentes tipos de música, de múltiples géneros, todas ellas en la máxima calidad digital (WAV o FLAC sin comprimir). Empezando por música clásica, escucharemos varios valses y nocturnos de Frederic Chopin, el “Concierto para piano Nº3” de Rachmaninov, el tema de la muerte de Sigfrido de Wagner, “Cuadros de una exposición” de Músorgski o el “Concierto para clarinete en La mayor, K. 622” de Mozart.

Posteriormente probaremos los temas “Nite Mist Blues” de The Monty Alexander Trio, el album “Cause and Effect” de Maria Mena, el album “Leave Your Sleep” de Natalie Merchant , el tema “No sanctuary here” de Chris Jones, “Everlasting Everything” de Wilco, “Tired” de Adele, “Dear Avery” y “The Hazards of Love 4 (The Drowned)” de The Decemberists , “Nobody Knows You when You’re Down and Out” de Katie Melua, “The Day Before the Day” de Dido y “Vicarious” de Tool.

También escucharemos varios fragmentos de películas que siempre suelo escuchar a la hora de hacer pruebas de audio en equipos de cine en casa y que me son ya bastante conocidos (“La Jungla de Cristal 5”, “Terminator Salvation”, “Star Trek en la Oscuridad", “Super 8” y “Oblivion”) y algunos videojuegos de acción.

Impresiones y calidad de sonido

Una vez conectado y colocado el equipo en la mesa del ordenador lo encendemos y observamos cómo se enciende el display. Seleccionamos la entrada de audio PC y empezamos la reproducción de los temas musicales.

La primera impresión que tengo es un sonido cálido, bien definido, con una buena imagen estéreo y unos graves potentes, quizá demasiado. No hay problema, ya que podemos regular la cantidad de graves con el control de la parte frontal. Los bajo un par de puntos y todo queda más empastado.

El control de volumen se mueve entre 0 y 60, aunque su punto dulce está entre 25-40. Si subimos más de ahí el sonido tiende a descontrolar y resultar algo chillón (podemos minimizar este efecto con el control de agudos). Sin embargo, la potencia sonora es más que suficiente a esos niveles de volumen, por lo que probablemente nunca necesites ponerlo a más de 40, salvo para pistas de audio grabadas con poco volumen.

Este es precisamente el caso de la música clásica, que a pesar de los potentes bajos y el contundente subwoofer, no consigue transmitir la sensación de realismo e inmersión sonora de los equipos HiFi convencionales. Con la música de otros estilos la cosa cambia. El resto de temas y en especial los que tienen graves potentes se reproducen de forma bastante fiel, dando la sensación de que tenemos ante nosotros un equipo más grande, tanto en tamaño como en precio.

Aunque en las especificaciones marca que el subwoofer baja hasta 30 Hz, la realidad es que tras pasarle una prueba desde 10 Hz a 100 Hz me da la impresión de que su auténtica respuesta en frecuencia empieza en los 45-50 Hz.

Debemos tratar de colocarlo lo más centrado posible, ya que si lo ponemos en un lateral de la sala, nos parecerá que una gran parte del sonido procede de ahí. Esto es debido a que los graves de los altavoces derecho e izquierdo van todos hacia el subwoofer, algo típico en este tipo de sistemas de sonido y que tiene fácil solución.

¿Qué tal la reproducción de películas y juegos? Pues si nos mantenemos en los niveles de volumen antes comentados es muy buena. Los diálogos suenan naturales y los efectos de disparos, explosiones, golpes, etc. bastante contundentes y impactantes. Otra vez parece que estamos ante un equipo de mayores dimensiones.

Conclusiones

Para valorar adecuadamente el producto debemos fijarnos primero en el tipo de sistema de sonido que estamos evaluando. En este caso, un conjunto de altavoces 2.1 de escritorio para uso todoterreno y que ocasionalmente podremos utilizar en algún televisor o como sistema HiFi auxiliar.

Tengo que reconocer que el sistema de sonido Rätsel BT me ha sorprendido gratamente. La calidad de construcción de sus altavoces es bastante buena. Son robustos y por encima de la media de altavoces para ordenador que veréis en las estanterías de las tiendas, construidos normalmente con plásticos.

Podemos usarlos sin problemas para ver todo tipo de vídeos desde Internet, películas, escuchar nuestra música favorita y como sistema de sonido de nuestros móviles o tabletas, tanto por Bluetooth como por cable jack de 3,5mm.

Quizá podamos echar en falta alguna entrada de audio de tipo digital y que el amplificador decodificase señales Dolby o DTS, aunque seguramente se hubiese incrementado su precio de forma innecesaria, sobre todo si lo vamos a usar como equipo de sonido para el ordenador y tenemos una buena tarjeta de sonido.

Y ¿en cuanto al precio y la disponibilidad? Pues en la web de la marca puedes encontrar los distribuidores físicos oficiales de cada país, aunque también puedes optar por comprarlos en Internet. Su precio variará entre los 190 y los 240 euros, dependiendo de la tienda y las ofertas en cada momento.

¿Merecen la pena? Si buscas nuevos altavoces para tu ordenador y los vas a usar en una sala de hasta 12-15 metros cuadrados a niveles de volumen medios, los Rätsel BT son una estupenda opción. Si quieres sonorizar un espacio más grande o te gusta tener una presión sonora elevada probablemente necesitarás más potencia y altavoces de mayor tamaño.

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