¿Qué ocurre con Brillo y HomeKit? Puede que muchos no se hayan planteado nunca esa cuestión pero, los que estamos interesados en temas domésticos lo hacemos cada semana. Después de Google I/O y la WWDC 2015 a penas se sabe nada nuevo. Ni Google ni Apple parecen estar dedicándoles mucho esfuerzo o, si lo están haciendo, no se nota.
No saber nada de Brillo por ahora entra dentro de lo normal. Su apuesta por el hogar conectado fue presentada este 2015 y es normal que haya fabricantes que aún estén viendo cómo implementarlo en sus productos actuales. Pero lo de HomeKit sí es más preocupante.
La solución de Apple parece haber pasado al olvido. La especificación está terminada pero aunque hay algunos fabricantes que ya lanzaron sus versiones compatibles parecen un oasis en el desierto. Y es un problema, porque puede parecer exagerado pero el hogar conectado necesita a Brillo y HomeKit.
La solución de Google y Apple no es que vayan a ser mejores que las actuales propuestas pero, sí serían el empuje necesario para la popularización real de la domótica doméstica.
Brillo y HomeKit deben ser la solución para interconectar productos que ahora mismo trabajan de forma independiente
No obstante, más allá de hacerla popular entre los usuarios, la principal ventaja para la domótica doméstica es que podríamos interconectar dispositivos de forma más sencilla. Es cierto que, para algunos fabricantes, esto no resulta interesante pues han invertido en un sistema y aplicaciones para el control que llevan perfeccionando durante meses o años. Pero, a veces, hay que rendirse a la evidencia: lo importante es vender productos.
Por ahora, si te gusta mucho la domótica puedes adquirir nuevos productos pero mi consejo sería hacerlo sólo si: a) sabes que no requerirás nada extra en un futuro, o b) prometen soporte para Brillo o HomeKit en un futuro cercano.
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