En varias ocasiones he detallado como en casa tengo varios altavoces inteligentes. De ellos, dos son de Amazo: un Echo Spot de primera generación con años a la espalda y un Echo Dot de 5ª generación. Este, junto con el Echo Dot de 4ª generación y el Echo (el grande), tienen un sensor de temperatura y mucha gente no lo sabe.
Y es que este secreto que estos modelos esconden en su interior ofrece, aunque no lo parezca, todo un mundo de posibilidades. Lo básico es conocer la temperatura real de la habitación en la que está como si fuese un termómetro. Pero es que además sirve para crear rutinas con otros dispositivos en casa.
Cómo aprovechar el sensor de temperatura
La inclusión de un sensor de temperatura hace que el altavoz pueda funcionar como un termómetro independiente, algo que ya vimos como usar en su día. Solo hay que preguntarle a Alexa por la temperatura en casa. De hecho hecho, si además tienes el nuevo modelo de 5ª generación con reloj, si le preguntas por la temperatura que hace, éste aparecerá de forma gráfica en los LED's incluidos
Alexa sensor de temperatura en pruebas pic.twitter.com/6VerzDFp1O
— jð†åå¢êµvê (@josetxu_granada) October 23, 2022
Pero es que, además, la presencia de un sensor de temperatura puede resultar muy práctica, ya que permite al usuario crear rutinas con otros dispositivos conectados. Como si fuese la hora u otro activador, la temperatura sirve para que se inicien o detengan determinadas rutinas.
Por ejemplo, podemos crear una función para saber la temperatura promedio de la casa si tenemos un grupo de altavoces con sensor, con solo preguntar a Alexa cuál es la temperatura del grupo de dispositivos que hemos creado. Si preguntamos “Alexa, ¿cuál es la temperatura del salón?”, Alexa dirá qué temperatura tienen.
El límite está en la imaginación. Si tenemos dispositivos integrados en el hogar conectado, podemos hacer que se activen y apaguen y crear rutinas en base a la temperatura existente en una habitación. Activar el aire acondicionado o la calefacción, cerrar cortinas, bajar persianas… Incluso establecer alarmas y que Alexa nos avise cuando la temperatura exceda o no llegue a un valor que hayamos determinado.
Cómo crear rutinas
Para hacerlo, lo primero que hace falta es tener instalada la app de Alexa en el móvil y registrarse con la cuenta de Amazon del dispositivo. Es obvio decir que la conexión al WiFi es necesaria.
Ahora abre la app de Alexa en el móvil y selecciona el Echo que vas a usar en “Dispositivos” y luego accede a los “Ajustes” con el icono en forma de rueda dentada.
De todas las opciones disponibles en el listado, elige “Sensor de temperatura” y luego pulsa en “Ir a Rutinas”. Fíjate en el icono más (“+”) en la parte superior derecha y haz clic en él para crear una nueva rutina y dale un nombre.
Ahora, para generar la activación, pulsa en “Cuando” y elige el icono de “Hogar digital”. Selecciona el Echo Dot y luego pulsa en el apartado “Temperatura”.
Ahí establece cuándo quieres que el Echo avise, ya sea al bajar o subir de una temperatura, y pulsa en “Guardar”. Ahora solo queda añadir lo que quieres que haga con ese activador en “Añadir una acción”.
Puedes elegir entre los distintos dispositivos que tienes conectados para que se active alguno de ellos, y, por ejemplo, que se encienda la calefacción, el aire acondicionado, o que suban o bajen las persianas.
En función del tipo de dispositivos y de la cantidad de ellos que tengas en casa, tendrás más o menos opciones para jugar con el sensor de temperatura del altavoz de Amazon. Y ya es la imaginación la que pondrá límites a lo que quieras o no hacer.
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