Por muy modernas que sean las cocinas actuales, a la hora de calentar los recipientes la única opción que suelen dar es cambiar la intensidad del fuego o de la electricidad en una serie de niveles prefijados. La comida se calentará en función del tiempo que la dejemos cocinándose, sin posibilidad de controlar su temperatura.
Control Freak quiere cambiar precisamente esta situación ofreciendo un control preciso de la temperatura a la que se están cocinando los alimentos, que podremos seleccionar entre 30° y 250°C para que sea ella quien se encargue de vigilarla por nosotros.
Se trata de una placa vitrocerámica de inducción que tiene un doble sistema de control. El primero está situado en su propia base y se encarga de medir la temperatura del recipiente. El segundo viene en forma de sonda que deberemos insertar en los alimentos y que teniendo en cuenta la información del primer sensor termina de ajustar la intensidad del sistema para mantener la temperatura constante.
Una vez alcanzado el punto óptimo de cocinado que le digamos, Control Freak se encarga de mantenerlo un máximo de 72 horas, dándonos la opción de variarlo en cualquier momento y lo que es más interesante, de programar instrucciones específicas con diferentes pautas que podremos introducir a través de un puerto USB.
Precio y disponibilidad
¿La principal pega del invento? Pues que por el momento solo está disponible en Estados Unidos y por un precio de nada menos que 1.799 dólares.
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