Con la llegada de las primeras olas de calor muchos se plantean si comprar un aire acondicionado o seguir con el tradicional o no tan tradicional ventilador. Lo cierto es que, una vez nos lanzamos a la compra de un dispositivo de aire acondicionado nos empiezan a asaltar las dudas. Existen diferentes opciones y cada una de ellas con sus ventajas y desventajas. Veamos cómo elegir el mejor aire acondicionado para el hogar.
Antes de seguir, si tenéis dudas de cómo funciona el aire acondicionado podéis ver un vídeo que prepararon nuestros compañeros de Decoesfera muy ilustrativo.
Tipos de aire acondicionado
Cada hogar es diferente. Cuando vamos a comprar un aparato de aire acondicionado tenemos que tener en cuenta varios aspectos: el primero son los metros cuadrados habitables, el segundo el número de habitaciones que queremos refrigerar y sobre todo la temperatura exterior que se alcanza en nuestra zona. Esto es importante porque en función a estos factores tendremos que recurrir a un modelo u otro así como invertir más o menos dinero para garantizar las frigorías mínimas necesarias para conseguir el efecto deseado.
En el mercado existen cuatro tipos de aires acondicionados: los de ventana, de un sólo Split, Multisplit y portátil. Cada uno tiene unas características y se adaptan a unas necesidades diferentes. Habría que aclarar antes de seguir que además de la función de refrigerar podemos encontrar modelos con climatizador que controlan el nivel de humedad y que incluso pueden ofrecer calefacción. Esto, evidentemente, aumenta el precio final.
Aire acondicionado de ventana son los más “sencillo” de instalar pero requieren una obra ya que debemos hacer un boquete en la pared donde insertaremos el aparato que debe quedar mitad fuera y mitad dentro. Luego están los modelos de Split y Multisplit, son actualmente los más vendidos. Tienen un compresor (exterior de la vivienda) y un vaporizador-condensador (interior de la vivienda) unidos mediante tuberías y se encargan de evacuar el aire caliente e introducir aire fresco. Y por último están los modelos portátil.
¿Cuál es el aire acondicionado ideal para mí?
El Aire de ventana es ideal por su fácil montaje y mantenimiento. El problema es que tendremos que elegir un buen lugar para su colocación y tener en cuenta que no llegará a todas las habitaciones. Además, al tener que realizar una obra, un boquete en la pared, puede resultar un problema si la comunidad de nuestra vivienda no nos permite hacerlo y para un futuro quitar o cambiar de ubicación. Tal vez, yo lo dejaría sólo para oficinas.
Los modelos de Split y Multisplit. Son los más vendidos, a día de hoy incluyen muchas ventajas como el ahorro energético, diseño, tamaño y niveles de ruido reducidos. Si sólo queremos una habitación sólo tendremos que comprar el modelo con un split, si por el contrario queremos refrigerar varias habitaciones el modelo multisplit nos permitirá tener un sólo compresor y dos o más vaporizador-condensador que podremos en las habitaciones deseadas, por ejemplo el salón y la habitación. La instalación, al requerir más metros de tubo oscilará entre los 250€ en adelante.
El modelo portátil, ideal para transportar allá donde haga falta. Su instalación sólo requiere colocar el tubo que tienen para explusar el aire caliente cerca de una ventana. Estos modelos han ido mejorando aunque por volumen y ruido yo lo dejaría como última opción o situaciones en los que sea para periodos de vacaciones o estancias en alquiler.
Conclusiones
Antes de comprar planifica bien qué estancias quieres refrigerar. A partir de ahí compara precios entre modelos similares y ten en cuenta el número de frigorías y metros de la habitación. Lo ideal es que, según la temperatura máxima que se alcance donde vivís, el aire acondicionado sea capaz de rebajarla en diez grados. Un ejemplo, en Sevilla con temperaturas de 40º tendríamos que asegurarnos poder llegar a los 25º para ello necesitaríamos unas 1500 frigorías para una habitación de 15 m2. Es decir, 100 frigorías por m2 y 150 frigorías por m2 si se trata de un ático o vivienda donde el sol de continuamente y las paredes se recalienten en exceso.
En cuanto al consumo, asegúrate que sea clasificación energética A si quieres tener el consumo más eficiente y si es Inverter, sistema que permite como el climatizador de un coche mantener una temperatura constante en lugar de enfriar la habitación a golpes de aire frio, mejor a pesar de elevar el precio del producto en dos o tres años lo habrás amortizado.
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