Es una de los cambios más baratos que puedes hacer en tu casa para reducir drásticamente el calor: refresca tu hogar sin obra

Durante el verano, raro es que media España no esté con el aire acondicionado a todo trapo en sus casas. Ahora que ya hemos entrado en septiembre y las temperaturas se están relajando en varios puntos del país, la cosa no es tan dramática, pero en determinadas regiones sigue siendo insoportable.

Pero claro, tenerlo encendido en todo momento también supone un gasto significativo en la factura de la luz. Refrescar nuestra casa sin la necesidad de aire acondicionado es posible (y muy necesario para renovar el aire de casa). Por ello, en este artículo hemos querido hablar de una serie de dispositivos que pueden darnos una gran ventaja en este aspecto.

Un pequeño ventilador de techo para cada punto de luz de tu casa

Dependiendo de la región donde vivamos y el modelo del mismo, puede ser una de las mejores ideas para así no tener el aire acondicionado enchufado todo el rato, suponiendo ese gasto en nuestra factura y destrozándonos la garganta si lo dejas toda la noche encendido.

Se ha hecho muy popular en redes y no es para menos, pues es una forma económica de reducir el calor en casa sin eliminar puntos de luz. Hablamos de esos pequeños ventiladores de techo con bombilla que no requieren instalación y que básicamente sustituyen nuestra bombilla para agregar un pequeño ventilador.

Estos pequeños aparatos los podemos encontrar tirados de precio en tiendas tales como Amazon, AliExpress y similares por unos 20 o 30 euros. El hecho de que no requieran una inversión algo más costosa como los ventiladores de techo tradicionales, hace que estos pequeños dispositivos se puedan instalar en todas nuestras luces de casa, por lo que es una buena manera de empujar las corrientes de aire de nuestra casa y disfrutar de brisas de aire en todo momento sin que esto suponga un gasto excesivo para nuestra factura.

Estos dispositivos también vienen con control remoto para manejar sus distintos modos de operación y también controlar el tipo de iluminación de la bombilla. Su instalación es sencillísima, ya que es prácticamente idéntica a la de cambiar una bombilla en casa. Cuenta con un ventilador al que podemos modificar su posición y, sin perder nuestro punto de luz, también tendremos varias tonalidades de color e intensidad en nuestra bombilla en forma de halo.

La mayoría de estos modelos son compatibles con enroscado E27. La potencia que consumen suele ser de entre 30 W y 60 W, dependiendo del modelo que queramos adquirir. También hay modelos donde las aspas son internas, mejorando su seguridad.

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