Estas son las razones por las que es mejor dejar de echar detergente directamente en la esponja cuando laves los platos

Fregar los platos es una tarea que debemos hacer recurrentemente y cada día (a ser posible). Aunque buena parte de los afortunados que cuentan con un lavavajillas lo de lavar a mano se les ha quedado en el olvido, hay situaciones en las que comenzar un nuevo ciclo del lavavajillas no sale a cuenta. Por eso mismo, el detergente y el estropajo acaban siendo nuestros mejores aliados en la cocina.

En el momento que utilizamos el detergente para lavar los platos, lo lógico es echarlo directamente al estropajo, ¿verdad? Pues la ciencia nos trae un método mucho más efectivo y económico para esta práctica. Bajo estas líneas te contamos todos los detalles.

Más detergente no implica eliminar más grasa

Antes de nada, cabe destacar que la razón principal por la que usamos detergente cuando lavamos los platos es para retirar la grasa y la suciedad de nuestros utensilios de cocina y vajilla. Lo que ocurre es que las moléculas de agua y grasa no se mezclan, por lo que para eliminar esta grasa de nuestros platos se requiere un producto como el detergente.

El detergente contiene un tipo de molécula que hace que tanto el agua como las moléculas de grasa se adhieran a él, por lo que tras frotar con el detergente y la esponja, la grasa se retira de la superficie junto con la espuma durante el proceso.

Sin embargo, a mayor cantidad de detergente no facilita más el proceso de eliminación de la grasa en platos y sartenes, sino que se necesita una emulsión de detergente, grasa y agua para que se produzca el proceso de eliminación. Por ello, el propio acto de fregar los platos con la esponja es importante.

Así pues, para lavar un plato entero, no es necesario utilizar una gran cantidad de detergente. Para una mayor eficiencia en el fregado, puedes verter entre una o dos cucharadas soperas rasas de detergente en un vaso con agua caliente y mezcla bien. Después, coge una esponja y empápala en esta solución.

Con la esponja mojada, lava los platos restregando por todas las zonas. Después, tan solo tendrás que aclarar y listo. De esta manera, ahorraras agua, detergente y tiempo. Eliminar el detergente bien es muy importante, ya que no queremos que este producto químico entre en contacto con el interior de nuestro cuerpo, siendo muy perjudicial para nuestra salud y órganos.

De esta manera, ya sabes por qué no hace falta tanto detergente para lavar los platos. Con esta mezcla rápida entre detergente y agua caliente podrás fregar toda tu vajilla, ahorrando agua y detergente.

Imagen de portada | Volodymyr Hryshchenko

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