Cambié de empresa eléctrica y ahora pago la mitad: esta es mi experiencia

Como hemos hablado en numerosas ocasiones en Xataka Home, el precio de la factura eléctrica en los últimos meses (y estos días) está siendo salvaje. Y la cosa, más allá de que lo peor del invierno ha pasado, no tiene visos de mejorar. Ante facturas desorbitadas, me pregunté si no había forma de pagar menos por la luz. Finalmente acabé cambiando de compañía eléctrica, y esta es mi experiencia.

Antes de continuar hay que dejar claros dos puntos. El primero es que mi comercializadora anterior, con la que pagaba tanto, era del mercado regulado, es decir, yo tenía una tarifa PVPC con los famosos tres tramos que entraron en vigor en junio. Esto quiere decir que desde el día antes podía saber cuánto pagaría por hora, pues son precios públicos y se registran en el BOE. La compañía a la que he cambiado es Naturgy. Veamos cómo ha ido.

Cómo y por qué cambio

Como decía, tras meses con consumos eléctricos bajos pero pagando casi el doble que en 2020 por consumos similares, me planteé por fin quitar la tarifa PVPC con la que mes a mes había estado ahorrando unos 20 euros sobre el mercado libre. Mi planteamiento es que cuando me saliera más caro el mercado regulado, haría un cambio, y volvería si volvía a invertirse el papel. Al final, lo que ha pasado es que aguanté demasiado en libre, y ya en septiembre debería haber cambiado. Pero somos resistentes al cambio, y nos gusta esperar a ver si la cosa se estabiliza.

Y no, los precios disparados no se han estabilizado. Así que me descargué mis datos de consumo de la web de mi distribuidora, algo que puedes hacer siguiendo este tutorial, y los llevé a la magnífica web Simulador Factura Luz. Si no quieres liarte mucho, puedes coger tu factura e introducir manualmente en el simulador datos como consumo en kWh.

La conclusión que saqué al ver la web era, literalmente, que tenía que huir del mercado regulado en su estado actual. Con esto no digo que mi decisión sea perfecta. Lo que me salía más barato en el momento en que hice el cambio (22 de diciembre) era la "Tarifa Compromiso" de Naturgy.

Hacer el cambio es muy sencillo. Lo puedes hacer por teléfono o a través de su página web. Para mi casa, lo hice por teléfono, y en unos pocos minutos estaba hecho, tras dar mis datos personales, dirección, número CUPS (viene en la factura eléctrica), etc. Para mis familiares lo hicimos a través de web, y lo mismo.

En su caso, trabajan desde casa con mucha calefacción y atendiendo al público, por lo que un cambio era incluso más importante. Llegaron a pagar 414 euros con un consumo mensual de 1.075 kWh y una potencia de 7,2 kW. Con el cambio, y manteniendo el consumo, han pagado 196 euros.

El cambio efectivo de compañía se produjo en tan solo cinco días, algo que pude ver a raíz de la web de la distribuidora, pues se detallaba el cambio de contrato. Otras personas tienen menos suerte en la gestión y ésta se demora más.

Cómo ha ido con Naturgy en atención al cliente, aplicación...

Una vez en Naturgy, tardé unos días en poder utilizar su aplicación. Y aquí me di cuenta de la enorme diferencia que había con Energía XXI, mi anterior comercializadora. La de Naturgy es una aplicación tosca, no fea pero no demasiado útil. A diferencia de la anterior, no me muestra el consumo diario, ni el de los últimos días ni el diario del mes anterior. Para todo ello, tengo que recurrir a la web de la distribuidora, que no cambia al pasar de una compañía a otra.

Pero lo peor no acaba ahí. Durante días y días ni siquiera pude acceder a la zona de cliente de Naturgy, por problemas técnicos de la compañía, ni vía web ni vía app, por lo que tuve que llamar para hacer una gestión, cambiar de potencia. Y aquí volvió a darse un problema importante. Pese a que te dicen que el cambio se hacen en pocos días, desde que pedí el cambio, 26 de enero, no volví a tener noticias por mail hasta el 17 de febrero, momento en que la web me notificó de "cambio de potencia iniciado" y de "cambio de potencia finalizado".

Necesitaba un cambio de potencia rápido ante problemas que tuve con los electrodoméstico, y no cumplieron. Mi conclusión es clara: si te importa mucho la aplicación, la web o la celeridad en las gestiones (que normalmente no hay que hacer con una compañía eléctrica, eso sí), Naturgy está lejos de ser aconsejable. Otro punto negativo a destacar es que la primera factura ha llegado con más de un mes de retraso.

Si te importa ahorrar, que era mi prioridad, Naturgy es buena compañía, como cualquiera del mercado libre que ahora mismo ofrezca un precio muy por debajo del del mercado regulado.

Al contratar, es importante fijarse en que no haya permanencias, como en mi caso no había, y también prestar atención a durante cuánto tiempo te mantienen el precio. En mi caso han sido dos años. Un periódo de tranquilidad importante, pero pudiendo irme cuando me apetezca.