Casi todos usamos alguna red WiFi en casa para conectarnos a Internet o para comunicar diferentes dispositivos del hogar inteligente, aunque lo hacemos un poco a lo bruto. Es decir, encendemos el router que emite una señal prácticamente omnidireccional a una potencia fija y ya está.
La señal llega como puede a las diferentes partes de la casa y también sale de ella a través de las paredes y ventanas, dando lugar a posibles intrusiones de nuestra red, por muy segura que creamos tenerla.
Llevamos años con este tipo de WiFi y ahora llegan los chicos del Computer Science and Artificial Intelligence Laboratory (CSAIL) en el MIT con un invento que podría cambiar las cosas para siempre. Se trata de Chronos, un proyecto liderado por el profesor Dina Katabi que permite localizar a los usuarios (humanos o no) de una red WiFi desde un único punto de acceso.
Midiendo la distancia entre emisor y receptor
La idea no es nueva. La triangulación de usuarios de redes inalámbricas es actualmente posible hacerla siempre que contemos con varios puntos de acceso emisores de la señal WiFi. Lo novedoso de Chronos es que afirman puede lograrlo desde un único punto, o lo que es lo mismo, podría implementarse en la próxima generación de routers y tener uno de estos localizadores en cada casa.
Según las primeras pruebas, el sistema es tan preciso que puede localizar en qué punto de la casa se está usando la red WiFi el 94% de las veces y con un margen de unos 10 cm, dependiendo de la cantidad de obstáculos que haya en la sala, de la ubicación y composición de las paredes, etc.
¿Cómo efectúan la localización? Pues midiendo el tiempo que tarda en llegar la señal desde el receptor al emisor, realizando una serie de cálculos y procesando los resultados con un algoritmo que elimina datos erróneos debido a las reflexiones en los objetos. El resultado es un error temporal que ronda los 0,47 nanosegundos, lo que afirman es hasta 20 veces mejor que el resto de sistemas actuales de localización en interiores.
¿Para qué querría tener Chronos en casa?
Vale, como proyecto científico está muy bien pero, ¿para qué puedo usar esta tecnología en casa? Pues para muchas cosas, ya que lo que estaríamos consiguiendo es dotar de control inteligente a la potencia de emisión del router.
Para empezar, el emisor de la red WiFi sería capaz de saber dónde está cada usuario o dispositivo con acceso a su red, lo que permitiría en un futuro ajustar la potencia de emisión hacia esos puntos en concreto.
También sería posible localizar a posibles intrusos de la red, al hacer un mapeado preciso de todos dispositivos conectados, para hacer un seguimiento de usuarios problemáticos dentro de casa (ancianos, niños pequeños, etc,), para saber dónde está la mascota a la que le hemos colocado un collar WiFi o simplemente para dar servicio WiFi solo dentro de un área o habitación concreta de la casa.
Y fuera del hogar también puede usarse para localizar a personas dentro de una gran instalación o para hacer que los robots y drones se muevan sin peligro de chocar por recintos cerrados.
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