Cómo usar tu móvil para tener Wi-Fi en cualquier sitio cuando no tienes cerca una conexión de fibra o un router al uso

Contar con Internet en cualquier lugar es posible y no hace falta ni contar con un router con cable o un router MiFi. Basta con aprovechar nuestro móvil o incluso algún teléfono viejo que tenemos guardado en el cajón y que no usamos y contar con una conexión de datos, para lo cual nos puede servir hasta la tarifa de datos del operador de turno.

En Android contamos con tres opciones a la hora de compartir la conexión a Internet con otros dispositivos: mediante cable USB, mediante Bluetooth y mediante un punto de acceso Wi-Fi. Desde Android 2.3 el sistema permite crear una Zona Wi-Fi para compartir la conexión de datos de nuestro dispositivo con el resto de dispositivos y así no depender de un router al uso.

Wi-Fi en cualquier lugar

Ideal para casos en los que no contamos con fibra o ADSL en nuestro hogar o si queremos hacer uso de una conexión a la red de forma puntual, este método puede ser una opción interesante. Sib cables y sin complicaciones. Podemos usar nuestra tarifa de Internet móvil para dar Internet a toda la casa, eso sí teniendo en cuenta el consumo de datos que vamos a efectuar para no comernos los gigas (no es cuestión de actualizar un juego de la consola con este sistema).

Con este método no precisamos contar con un router WiFi 4G o MiFi 4G. Sólo necesitamos contar con un móvil con tarjeta SIM y una tarifa de datos funcional y activar la función que por regla general encontrarás en "Ajustes" y "Conexiones" y buscar "Zona Wi-Fi" o "Compartir Internet". Esto puede cambiar según el modelo.

Lo primero que tenemos que hacer es entrar en "Ajustes" y luego buscar el subapartado "Conexiones" para luego pulsar en "Conexión compartida". Estos son nombres que pueden cambiar según la marca y modelo de móvil, pero suelen ser muy similares.

Verás cómo el móvil ya ofrece un punto de acceso listo para ser usado, pero es interesante configurarlo para hacer más fácil recordar el nombre y contraseña. Además, en algunos modelos puedes elegir apartados como el tipo de banda para la red creada (de 2,4 o de 5 GHz) o el tipo de cifrado y elegir entre WPA2 PSK o Ninguna, en cuyo caso la conexión no tendrá contraseña (no es aconsejable). En versiones antiguas de Android pueden incluir otras opciones como WEP o WPA).

Además en algunos modelos más modernos podemos encontrar una serie de parámetros para una configuración avanzada. En mi caso, aparecen opciones que permiten ocultar el nombre de la red, compartir el Wi-Fi, establecer el modo ahorro de energía o incluso establecer un tiempo de desconexión si no se conecta algún dispositivo.

Con los cambios guardados, ahora si quieres activar la conexión compartida puedes ahorrarte estos pasos. Si bien puedes hacerlo desde la misma pantalla de la configuración, lo más práctico es hacerlo usando los ajustes rápidos: baja la persiana y toca en el botón "Conexión compartida" u otro similar. Se activará la conexión compartida de datos desconectándose automáticamente la conexión Wi-Fi si se encontrara activada.

Desde el dispositivo con el que te quieres conectar sólo debes buscar la red Wi-Fi que has creado e introducir la respectiva contraseña.