Comprar un televisor no es lo mismo que adquirir una pantalla para usar con el ordenador. Aunque podemos aplicar algunos puntos en común hay características claves que debemos tener en cuenta para no equivocarnos, o al menos encontrar el más ideal según nuestro presupuesto. Por ello, si buscas un nuevo monitor de ordenador aquí encontrarás una guía para comprar el monitor ideal.
Planificando las necesidades
El monitor es para mí tan importante como contar con un equipo capaz satisfacer todas nuestras necesidades a nivel de potencia, rendimiento, etc. Por ello, antes de lanzarse a comprar uno nuevo es importante revisar qué necesitamos y cómo vamos a hacer uso de él.
Para comprar un nuevo monitor lo mejor es hacer una lista donde detallemos qué elementos debe incorporar. Aquí hablamos de conexiones de vídeo, tipo de panel, espacio de color capaz de reproducir, ajustes de posición,…
No es lo mismo un monitor para alguien que se dedica a trabajar con planos de AutoCAD a uno que lo hace en temas de vídeo o fotografía por ejemplo. Ni mucho menos si lo que hacemos es redactar textos.
El tipo de panel
Dentro de la tecnología LCD existen diferentes tipos de paneles, cada uno de ellos aporta unos beneficios pero sobre todo incide de forma importante en el precio final del producto. Tenemos paneles de tipo TN, VA, IPS y PLS.
-
Panel TN, son los primeros paneles que aparecieron. Su larga vida en el mercado ha permitido abaratar mucho sus costes de fabricación por lo que permiten hacer monitores con un precio inferior a otra opciones. Su rendimiento es bueno con unos tiempos de refrescos muy bajos. La parte negativa es que los ángulos de visión son muy pequeños y los colores no son tan fidedignos con la realidad.
-
Panel MVA, son una mejora de los paneles TN. Capaces de ofrecer mejores negros y contraste también mejoran los ángulos de visión. Aún así, la pega que se le puede achacar es que pierden un poco de luminosidad y fidelidad de color frente a opciones como IPS. Aún así son una buena opción a un precio intermedio.
-
Panel IPS, son la gran opción. La mayoría de usuarios busca monitores con paneles de este tipo que ofrece un gran ángulo de visión, un buen tiempo de refresco y una reproducción de color muy satisfactoria. Existen algunas variantes como S-IPS (sustituto actual) o H-IPS que consisten en mejoras de la tecnología base, de forma que aumentamos calidad de imagen, tiempo de refresco de pixel llegando a conseguir una reproducción de color prácticamente igual a la ofrecida por los antiguos CRT.
-
Panel PLS, tipo de panel con una tecnología desarrollada por Samsung que mejora el ángulo de visión de los IPS (178º de ángulo de visión), otorga más luminosidad y permite un ahorro del 15% en su fabricación.
Tipo de iluminación
Cada vez es menos frecuente pero sigue habiendo quien cree que un monitor LCD es diferente a uno LED. Por simplificar todos hemos adoptado LED como la forma en que nos referimos a monitores o televisores LCD-LED donde en lugar de usar lámparas fluorescentes hacemos uso de pequeños LED que retroiluminan la pantalla.
Por ventajas en temas de grosor así como ahorro energético, la mayoría de pantallas que vamos a encontrar son de tipo LED. Si hay alguna LCD tendremos que valorar mucho el precio y característica porque posiblemente no interese.
Volviendo a la iluminación LED podremos encontrar varios tipos según usen una tira de LEDs a los laterales, en todo el borde o por completo la parte trasera (se conocer como Direct LED). Las diferencias entre unos y otros suelen afectar a la calidad de los negros. Si sólo tenemos iluminados los laterales la luz se reparte mediante difusores. Mientras, si tenemos tiras de LEDs en los cuatro bordes se suele usar la función de atenuación (lo que llaman algunos fabricantes como micro dimming) que permite apartar pequeños grupos de LEDs mejorando así el contraste y por tanto la calidad de los negros.
Resolución de pantalla
Si recordáis, si no os lo recuerdo, cuando hablamos si era factible usar un televisor Full HD como monitor de ordenador ya comentamos que el tamaño del pixel era importante tenerlo en cuenta. Y dicho tamaño afecta según la resolución y tamaño de pantalla.
Evidentemente a mayor resolución mejor puesto que los sistemas operativos actuales permiten hacer uso de resoluciones grandes. Esto se traducirá en mejor legibilidad de textos con un tamaño de tipografía más pequeño y mejor definición de los detalles. Por tanto, elijamos el tamaño de pantalla.
Actualmente podríamos decir que las 21 pulgadas es el tamaño estándar. Es cierto que encontramos aún monitores de 19 pero merece la pena ganar esas dos pulgadas de más. Igualmente optar por pantallas de 24 o 27 no es nada descabellado siempre y cuando tengan una resolución mínima, de 1920x1200 o 2560x1440 respectivamente.
Lo que sí os recomendaría es que no optaseis por ninguna pantalla a 1080p que sea mayor de 21 pulgadas. No obtendréis la experiencia esperada. Junto al tema de la resolución podríamos tener en cuenta también la relación de aspecto (Aspect Ratio) o lo que es lo mismo si es formato panorámico 16:9, 16:10, 4:3... Ahora todos son panorámicos con una relación 16:9 o 16:10. Personalmente me gusta la segunda opción, ganamos pídeles en vertical y para temas multimedia (películas, series,etc) siempre suelen añadirse franjas negras por lo que no hay problema.
Conexiones del monitor
Pasando a otro punto importante, las conexiones que necesitemos es importante tenerlas en cuenta. Según la salida de nuestra tarjeta gráfica veremos si podremos conectarlo vía VGA, DVI, HDMI, DisplayPort o Thunderbolt.
Creo que hoy en día es imprescindible contar con DVI como mínimo, lo ideal es HDMI. Además de las ventajas de ser una conexión digital está la opción de poder usarlo con una consola de juegos, sintonizador de TV de alta definición, etc.
Por descontado, si dispone de varias entradas mejor ya que podríamos tener conectados varios dispositivos e intercambiar la fuente de forma rápida. También podremos mirar si nos ofrece algún puerto USB adicional.
Una vez tengamos todo y hayamos visto opciones lo mejor, si es posible, es acercarnos a un distribuidor para poder comprobar in situ la calidad. Para ello nos aseguraremos que la resolución establecida es la nativa, comprobaremos la calidad, definición y legibilidad de letras pequeñas (podemos usar el navegador y mirar alguna web); y por último alguna imagen colorida.
Pequeños extras de tu nueva pantalla
Si el contar con opción de puertos USB adicionales también existen otros pequeños extras que pueden resultar interesantes y motivo para decantarnos entre una u otra opción. El primero de todo es la posibilidad de colocar o no en posición vertical la pantalla.
Mediante la configuración de la gráfica de nuestro ordenador podemos usar el monitor en forma vertical. El problema es que no todos los fabricantes ofrecen la opción de, en su propia pena, voltear el mismo.
Además, también es importante ver si podemos o no ajustar en altura la pantalla. Como sabréis, tenemos que mantener una postura recta y el borde superior de la pantalla debe estar al mismo nivel de los ojos. Algunos monitores como el de Philips con PowerSensor nos ayudan mediante avisos pero es una cuestión de hábitos mantenerla. Pudiendo ajustar la altura nos resultará más fácil.
Los altavoces son otro pequeño extra. Para algunos que no requieren una alta fidelidad con tal que puedan reproducir audio les vale pues para un poco de música o algún vídeo puntual les vale, ahorrando así espacio sobre la mesa de trabajo.
Conclusiones
Resumiendo un poco todo, cuando vayamos a adquirir un nuevo monitor es importante saber qué necesitamos. Hacer una lista con las conexiones que usa nuestra tarjeta gráfica, posibilidad de cambiar más adelante de equipo y requerir nuevas opciones, la resolución y uso que vamos a hacer de él son prácticamente los puntos imprescindibles a tener en cuenta.
A partir de ahí yo recomendaría un panel tipo IPS, tamaño de pantalla de 24 o 27 pulgadas y nada de resolución Full HD, siempre una resolución mayor. En temas de conexiones HDMI y si es posible Display Port.
Extras como puertos USB, ajuste en altura o rotación de la pantalla son interesantes pero más o menos solucionable de forma fácil mediante un HUB conectado al PC y un soporte (bien de pared o brazo para mesa) que nos ofrezca libertad para colocar el monitor como queramos.
Bonus extras, espacio de color
El espacio de color es algo que afecta sobre todo a profesionales creativos, fotógrafos, etc. No todos los monitores son capaces de reproducir los espacios de color existentes. Según trabajemos con el espacio de color sRGB y AdobeRGB tendremos que ver qué monitor adquirir.
Cuando trabajemos con un monitor capaz de reproducir el espacio AdobeRGB (también habría que ver qué porcentaje) podremos apreciar una mejora en la pureza de los colores. Ideal a la hora de visualizar fotografías que luego serán impresas puesto que si van a ser visualizadas en web entonces tendremos que convertir a sRGB pero eso ya es otro tema.
En Xataka Smart Home | Guía para comprar un televisor Imagen portada | Workstationssetups
Ver 6 comentarios