A la hora de mantener nuestra casa controlada en todo momento incluso cuando nos ausentemos, juegan un papel fundamental las cámaras de vigilancia. Se trata de un dispositivo económico y asequible que permite conocer en tiempo real, lo que sucede en nuestro hogar usando el teléfono como punto de acceso.
Sin embargo pese a todas las ventajas y beneficios que ofrecen, hay que tener en cuenta que no cualquier sitio vale para colocar una cámara de vigilancia y esta ofrezca las prestaciones que esperamos. Y es que hay una serie de lugares que hay que evitar a la hora de instalar una cámara IP para así, evitar llevarnos una sorpresa desagradable.
Que pueda taparla algún obstáculo
Y el primer lugar, por muy obvio que puede aparecer, mal lugar es aquel en el que hay un obstáculo que dificulta la visión de la cámara de vigilancia. Y no no me refiero a colocar la cámara, justo detrás de un altavoz o del televisor.
Existen situaciones en las que se puede instalar una cámara de vigilancia y por ejemplo no tener en cuenta que cerca hay un tendedero y que la ropa puede molestar o que hay un árbol que se puede mover con el viento y dificultar la visión. Son solo dos ejemplos de situaciones que conviene evitar cuando se coloca una cámara de vigilancia.
Que “pille” solo cielo
Otro ejemplo o mejor dicho mal ejemplo, es el que está referido a cámaras de vigilancia que se colocan en una posición en la que gran parte de la imagen que capturan corresponde al cielo.
Hay cámaras con un amplio grado de visión y cuando se colocan debemos evitar que estén orientadas de forma que gran parte de lo que capturen corresponda al cielo. Es más interesante orientarlas y hacer pruebas que sirvan para comprobar que la imagen capturada es algo que realmente interesa.
Que enfoque al piso del vecino
También hay que tener cuidado con la orientación que tiene la cámara para evitar invadir la privacidad de otros vecinos, así como no se debe instalar de forma que capture indiscriminadamente lo que ocurre en la calle. Ojo, porque eso puede ser constitutivo de delito.
En este sentido, no es adecuado instalar una cámara de vigilancia que capture por ejemplo parte del hogar de un vecino como puede ser un patio o una terraza. Este tiene derecho a la privacidad y una cámara instalada de esta forma puede atentar contra ese derecho y provocarnos más de un problema.
Si tenemos que instalar una cámara y no queda más remedio en su rango de vigilancia abarque la propiedad de un vecino, podemos buscar alguno de los modelos que existen en el mercado y que permiten establecer zonas oscuras que quedan al margen del campo de vigilancia de la cámara.
Colocar la cámara junto a la ventana
Por muy interesante que pueda aparecer, otro error básico es el asociado a colocar cámaras junto a las ventanas. Puede parecer una solución válida el usar una cámara de interior para vigilar la calle y como normalmente no cuentan con protección contra los elementos, una cámara de vigilancia dentro de casa, junto a la ventana, puede sacarnos del apuro. es una solución más económica que usar una cámara para exteriores, pero a cambio vamos a perder capacidades.
Por un lado, el campo de visión va a ser mucho más reducido, pese a que se coloque junto a la ventana y además se pueden provocar reflejos de los cristales provocados por el sol incluso aunque se pegue el objetivo a la ventana. Con estos dos ejemplos vemos cómo la cámara perdería efectividad a la hora de vigilar lo que ocurre en casa.
Instalar cámaras en casa sin avisar
Otro de los puntos, especialmente delicados es el relacionado con cámaras instaladas dentro de casa, sobre todo cuando se trata de pisos de alquiler turístico o de cámaras, situadas en zonas especialmente sensibles.
En este sentido, si hay alguna cámara vigilando el interior debemos comunicarlo y hacerlo saber de forma adecuada para que no haya dudas al respecto y cualquiera que esté en el piso tenga conocimiento de este hecho.
Además, no podremos instalar cámaras en zonas especialmente sensibles, como puede ser un baño o el dormitorio, puesto que puede hacer que incurramos en alguna ilegalidad.
Lugares difíciles de ver
Otro sitio que hay que evitar es aquel que ofrece pocas posibilidades de acción. Lo normal es que si alguien va a entrar en casa, lo haga por el punto más obvio como puede ser la puerta principal, el garaje o una ventana.
Si instalamos la cámara de vigilancia enfocando a zonas como puede ser un callejón, un tejado... puede que estemos dejando las principales zonas de acceso al hogar sin cubrir y sin vigilar. Si sólo vamos a poner una o dos cámaras, es adecuado hacer un estudio de los lugares en los que es más adecuado colocarlas.
Vía | CNET
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