No todos los envases son seguros para calentar en el microondas o guardar tu comida en el frigo: la OCU nos desvela las claves

Dos de las formas más habituales de ahorrar a la hora de alimentarnos cada día en casa pasan por gastar la menor cantidad energía posible al cocinar y sobre todo por no desperdiciar los valiosos alimentos.

Son acciones que hacemos de forma cotidiana guardando restos de comida que no hemos consumido en un recipiente en la nevera, o recalentando en el microondas, muchas veces sin pararnos a pensar si las estamos realizando de la manera más segura.

Y según ha desvelado el último estudio de la OCU parece ser que la mayoría de consumidores domésticos no lo hacemos bien del todo, ya sea porque desconocemos algunos problemas asociados a cierto tipos de recipientes o sencillamente porque ni nos planteamos que haya una mejor forma de hacerlo.

En concreto, en una encuesta realizada en colaboración con Euroconsumers a 1.048 personas de entre 18 y 74 años se ha obtenido como resultado que uno de cada dos consumidores usa incorrectamente los envases alimentarios que tiene en casa, lo que aumenta el riesgo de que las sustancias que los componen pasen a los alimentos que son consumidos posteriormente.

De hecho, solo el 47% de los encuestados conoce que algunos envases pueden liberar sustancias tóxicas cuando entran en contacto con alimentos ácidos, como el tomate troceado o los grasos, como un guiso con aceite. Además, tan solo el 27% de los encuestados sabe que hay un símbolo que garantiza el calentamiento seguro de ese envase en el microondas (el dibujo de un microondas con rayas onduladas).

Consejos para usar nuestros recipientes y envases de forma segura

En el estudio de la OCU también se desvelan algunos consejos básicos para utilizar los recipientes y envases más habituales que tenemos en casa, ya sea tanto para almacenar comida en el frigo como para calentar en el microondas. Como veremos a continuación, algunos son intuitivos, pero otros son más especializados y conviene tenerlos memorizados:

• Para empezar, hay que tener en cuenta que los envases que vienen incorporados con algunos alimentos, como una botella de plástico del agua, de un refresco, la tarrina del helado, etc., están pensados y garantizan la seguridad si los usamos una sola vez. Si andamos reutilizando y por supuesto calentando con ellos en el microondas podemos tener riesgos de que sustancias tóxicas pasen a los alimentos.
• Es preferible utilizar recipientes de vidrio, acero inoxidable o cerámica a la hora de almacenar nuestros alimentos y calentar en hornos y microondas (en este último caso solo vidrio y cerámica). Y ante la duda, conviene priorizar los envases con el símbolo del vaso y el tenedor.

• También hay que evitar calentar tuppers de plástico en el microondas y por supuesto no hay que calentar con el clásico film de plástico en la parte superior. Mejor sacamos a un plato los alimentos antes de calentar.
• En este sentido, a la hora de calentar en el microondas hay que asegurarse de que el recipiente puede utilizarse en este tipo de horno. Suele indicarse con un símbolo de un microondas con rayas onduladas dentro y en algunos casos viene escrita también la potencia máxima admitida.

• Si somos de comprar comida para recalentar en casa, aunque indique que se puede calentar en el microondas en el envase original, si podemos es preferible que lo hagamos directamente en un plato y así nos aseguramos.
• También hay que respetar la temperatura máxima marcada por el fabricante en el envase si vamos a introducirlos en el horno, sobre todo si son de silicona o plástico.

• Otro punto importante es evitar usar envases que tengan olor o sabor metálico o si al calentar huele a plástico quemado, quiere decir que ya no son seguros.
• El papel de aluminio no es recomendable para envolver y dejar en en el frigo alimentos salados como embutidos ni ácidos como tomates troceados. De hecho este es un punto que la OCU recalca se advierte en la mayoría de los rollos de papel de aluminio que todos tenemos en casa pero que nunca leemos.
• Por último, desde la organización de consumidores dan algunas pautas con respecto al bambú, que es seguro para almacenar y calentar si los utensilios están elaborados con bambú 100%, pero no siempre si contienen plásticos mezclados ya que pueden tener en su composición sustancias tóxicas como la melamina y el formaldehido.

Imagen de portada | Stepan Kulyk

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