El televisor ha sido uno de los inventos más importantes de la historia, un dispositivo que cambió la forma en que recibíamos la información y una fuente de entretenimiento inagotable. Pero no fue fácil llegar hasta donde estamos ahora.
Su nacimiento se produce a raíz de las necesidades de una personas que se preguntaba por qué no podía ver a su familia, a miles de kilómetros de distancia, pero sí podía hacerlo con el sonido mediante el teléfono. Paul Nipkow era esa persona inquieta y detonante del nacimiento del televisor.
Una breve historia del televisor
Cómo podéis ver en el vídeo superior, Nipkow inventó un disco rotativo que permitía crear una imagen en una pantalla. Para ello lo hacía girar a gran velocidad y con unos agujeros que dejaban pasar la luz se generaba la imagen. Fue la base utilizada en un principio y que luego siguieron numerosos inventores e ingenieros para ir mejorando el sistema poco a poco.
Aunque si hay dos figuras importantes juntos a Nipkow son Baird y Zworykin. Ellos tres podrían decirse que son los principales responsables del nacimiento del televisor. El primero consiguió una retransmisión a larga distancia y el segundo el inventor del tubo de rayos catódicos.
En cuestión de pocos años y según se fue perfeccionando el disco de Nipkow se llegó a un punto donde ya no era posible avanzar. El motivo, la mayor complejidad por hacer girar el disco cada vez a mayor velocidad para representar más líneas. El televisor pasó de ser un aparato electromecánico a uno electrónico con el tubo catódico como principal elemento. Y que el 26 de enero de 1926, fecha en que Baird consiguió mostrar la imagen de su marioneta, empezó a crear la industria de la televisión.
A partir de ahí el interés fue creciendo y las primeras emisiones públicas se realizaron en Inglaterra por la BBC y la CBS y NBC en Estados unidos en 1927 y 1930 respectivamente. La expectación era grande y muchos seguían sorprendiendo aunque la viesen una y otra vez.
Evolución del televisor
Desde el primer televisor hasta los actuales ha habido numerosos cambios. Ya no sólo por los avances en temas tecnológicos que han posibilitado los televisores planos sino también por el nacimiento del ordenador e internet.
En tvhistory podemos encontrar una recopilación por años con diferentes modelos de televisor y ver como ha ido evolucionando. En 1928 uno de los primeros modelos era electromecánico. El modelo de Baird que podéis ver arriba nos proporcionaba una pequeña pantalla con una lente que aumentaba el tamaño de la imagen, de pocos centímetros por aquel entonces.
Más tarde, en 1935 con la llegada del tubo catódico, invento de Karl Braun en 1897, permitió una nueva serie de televisores con las primeras pantallas en blanco y negro y que sin duda mejoraban sustancialmente lo anterior. Eran los primeros aparatos electrónicos y a pesar de sus generosas dimensiones para el tamaño de pantalla mostrado parecían del futuro.
Luego vendrían más modelos como los de la ilustre Motorola, el modelo VT71 data de 1947. Y así vamos avanzando hasta la creación del primer televisor a color, un sistema tricromático secuencial de campos que parte de los colores primarios rojo, verde y azul (RGB). Eso sí, no fue hasta 1954 cuando RCA lanzó el primer televisor a color, el modelo CT-100.
El CT-100 tenía una pantalla de 15 pulgadas y bajo el sistema NTSC supuso toda una revolución. Ahora sí empezábamos a ver las cosas tal y como son, a todo color.
Ya en 1964 se inventó en la Universidad de Illinois la pantalla de plasma. Aunque no fue hasta 1997 cuando Pionner comenzó a vender el primer televisor con pantallas de plasma para consumo masivo. Y a partir de aquí la mayoría ya sabéis como ha ido todo. Pantallas cada vez más finas, sintonizadores de alta definición, resolución de imagen Full HD y 4K, acceso a internet y muchos más.
El televisor del futuro según lo imaginaron años atrás
Imaginar como sería el televisor del futuro es algo que hicieron muchos. El futuro es algo que siempre ha generado mucho interés. Y todos en algún momento hemos pensado como serán las cosas en los años venideros.
Por aquel entonces donde la tecnología no avanza al ritmo de hoy en día era más frecuente aún. En The World of the future, Future Cities, podíamos ver como serían los los hogares y la vida en el siglo 21.
En su interior encontramos una imagen donde vemos un hogar del futuro, al menos del que ellos imaginaban. En él podemos ver diversos elementos que hoy no nos parecen nada extraño. Y es que salvando las distancias de diseño hoy es normal encontrar un salón donde hay un equipo de sonido y un televisor de grandes pulgadas. En la imagen se muestra una pantalla de dimensiones generosas algo que hoy fácilmente conseguimos con televisores de 46, 55 o 60 pulgadas (más grandes si queremos también) o incluso con un proyector.
Pero no es la única imagen. En 1979 tener un televisor de grandes dimensiones era todo un sueño que se sumaba al de una habitación dedicada a él donde el usuario disfrutaría de una experiencia sensorial completa. Es decir, ni más ni menos que una sala de cine en casa. Aunque muchos también disfrutamos del mejor sonido e imagen en nuestro salón gracias a sistemas 5.1, barras de sonido y nuestro televisor plano.
Respecto al diseño era más difícil acertar. En aquel entonces el tubo de rayos catódico era la base e imaginar hacer un televisor más grande resultaba complicado por las dimensiones que tendría el tubo. ¿Recordáis el "culo" de los televisores de tubo de 28 pulgada?
RCA lo intentó con un modelo que según su publicidad nos haría viajar al año 2000. Claro que viéndolo ahora más bien parece un mueble de IKEA para esconder el televisor que un televisor futurístico. Aún así para 1969 tener un mueble con un diseño rompedor donde al abrir dos puertas se mostraba un televisor era sin duda alucinante.
Y junto al televisor había una idea que no se separaba, las vídeollamadas. En muchas películas de ciencia ficción veíamos como se comunicaban con otras personas que estaban a miles de kilómetros mediante la imagen en el televisor. Algo que Western Electrics planteó con Picturephone, un teléfono que contaba con un sistema capaz de capturar y enviar nuestra imagen así como mostrar en pantalla la de nuestro interlocutor.
En su eslogan decían: Algún día tu serás una estrella. Hoy no hace falta ser una estrella para disfrutar de la vídeoconferencia. Muchos televisores incluyen ya una cámara a través de la cual y con aplicaciones como Skype somos capaces de hacer lo mismo pero sin teléfono, a través de internet.
Otras referencias a cómo pensaban que serían los televisores del futuro las encontramos en el cine. En Regreso al futuro 2 vemos como al entrar en la cafetería Marty McFly se ve sorprendido por un televisor que mediante un brazo mecánico aparece frente a él, pero ojo, es un televisor de tubo. No es la única, a continuación una galería con escenas de películas y publicidad de años atrás donde aparecen televisores del futuro.
El sonido en los televisores
El sonido es el 50% de una película según George Lucas y estoy de acuerdo. En los primeros televisores este no existía, sólo se transmitían imágenes. Pero no tardó en llegar el sonido, eso sí, mono. Pues no fue hasta 1981 cuando se lanzó el primer televisor con sonido estéreo. Aún así cuando se miraba al futuro muchos veían claro que el sonido sería emitido a través de altavoces más grandes y de mejor calidad.
Altavoces que se situarían a cada lado o en compartimentos diferentes de donde iría la pantalla. Lo que ahora mismo hacemos gracias a equipos de audio u Home cinema. Lo que demuestra que en ese campo no estaban muy equivocados y es que sigue siendo la mejor forma para disfrutar de una experiencia auditiva plena.
El televisor en la actualidad
Sin duda, navegar por internet en busca de material antiguo, del retro futuro, es apasionante. Encontramos unas imágenes, conceptos e ideas que hoy vemos como no sólo se han superado sino que son muy diferentes y por supuesto mejores. También vemos como había predicciones que se han cumplido tal y como decían.
Respecto al televisor no era sencillo imaginar cómo serían pues no sabían como avanzaría la tecnología, pasando del tubo a los televisores planos. La mayoría simplemente adornaban los modelos de entonces con muebles de corte futurista y algún modelo con unos trajes y modelista muy espaciales. Si hoy pudiésemos volver y mostrarles que hay pantallas de hasta 150 pulgadas como el plasma de Panasonic, de pocos centímetros de grosor, con conexión a internet, que se pueden manejar con la voz o gestos igual a muchos les daría algo.
Pero tranquilos, seguramente en 20 o 30 años seamos nosotros los que digamos ¡alucinante! Pues seguramente llegarán novedades que nos dejarán asombrados. Tal vez no sea un cambio tan radical pero las tecnologías que se están desarrollando podrían ofrecernos: pantallas de grandes pulgadas con pocos milímetros de grosor, flexibles y con nuevos métodos de control e interacción. O quien sabe si un cristal transparente será donde se mostrarán las imágenes al estilo Minority Report y películas similares. Aunque mi apuesta personal pasa por los asistentes de voz como principal punto fuerte y foco de innovación.
Con suerte, dentro de unos años volvamos a hablar de retrofuturo. Sólo que esa vez nuestros actuales televisores serán los que forme parte de una colección de imágenes retro.
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