Hasta finales de los 90 y principios de los 2000, los televisores con tecnología de tubo de rayos catódicos nos acompañaron durante buena parte de nuestra vida. De hecho, aún a día de hoy es posible que tengas en el trastero algún televisor de este tipo, muy codiciados en la actualidad sobre todo por los amantes de los videojuegos retro.
Sin embargo, antes de que la tecnología desapareciese de los hogares poco a poco, las teles CRT también metieron un pie en la alta resolución. Y es que antes de ser reemplazadas por los televisores de plasma y LCD, hubo fabricantes que lanzaron al mercado varios modelos con resolución HD, siendo una evolución considerable y un paso lógico en un contexto en el que la era digital tomaba cada vez más forma.
¿Qué son las teles CRT?
Conocidos coloquialmente como 'televisores de tubo' o 'televisores CRT', es la tecnología en la que fue concebida la televisión, es decir, a través de un tubo de rayos catódicos que incidían hacia una pantalla de vidrio electroluminiscente recubierta de materiales como fósforo y plomo, generando la imagen a partir de una gran diferencia de tensión. El plomo se utilizaba para bloquear los rayos X generados a partir del proceso y perjudiciales para el usuario, mientras que el fósforo permitía la emisión de la imagen.
Caracterizados por unas dimensiones voluminosas y una pantalla convexa con relación de aspecto 4:3, permaneciaron durante buena parte de nuestro tiempo en los salones de casa, siendo reemplazados en su mayoría por televisores más eficientes, con mayor resolución y menos voluminosos (o al menos más planos, ya que actualmente podemos ver televisores por encima de las 100 pulgadas). Además, podían suponer un riesgo para el usuario debido a la toxicidad de los materiales de los que hacían uso estos televisores, junto al voltaje necesario para ponerlos en funcionamiento.
Televisores CRT con resolución HD
Se empezaron a ver a finales de la década de los 90 y durante los primeros años de los 2000. Estos podían ofrecer resoluciones en 720p, e incluso 1080p, ofreciendo así una relación de aspecto de 16:9 y un panel plano (a diferencia de la curva característica de las teles CRT). En cuanto a dimensiones, solían tener un tamaño similar, y también hacían uso de la tecnología CRT para generar la imagen, razón de las grandes dimensiones de este tipo de televisores.
Su uso era muy frecuente en las cadenas de televisión y emisoras que en la época se encontraban desarrollando contenido en HD. Sin embargo, este contenido no comenzó a llegar hasta que la resolución HD no se asentó en el mercado.
Una vez que la alta resolución empezaba a instaurarse en los hogares, en el mercado podíamos encontrar modelos de televisores CRT HD. Algunos fabricantes que hacían uso de esta tecnología fueron Sony, Samsung, Philips, Panasonic y demás. Sin embargo, estos televisores no eran nada económicos, ya que la materia prima necesaria para su desarrollo era más difícil de conseguir y fabricar en comparación a la utilizada en teles de plasma y LCD que comenzaban a llegar al mercado.
La calidad de imagen que ofrecían estos televisores era mucho mejor en comparación a los anteriores CRTs. Su comercialización iba más allá de los televisores, extendiéndose también en monitores de ordenador.
La alta resolución llegó en una época en la que había una necesidad de hacer evolucionar el hardware en televisores. Es por ello que las teles CRT con resolución HD no duraron demasiado en el mercado. Además, los televisores de plasma y LCD estaban a la vuelta de la esquina, y comenzaron a abaratarse cada vez más, haciéndose más accesibles para el usuario.
Aunque ahora estén prácticamente en desuso, a día de hoy existe un nicho que sigue disfrutando de ellos, ya que son una opción muy recomendada para la reproducción de contenido antiguo o de baja resolución.
Ver todos los comentarios en https://www.xatakahome.com
VER 2 Comentarios