¿De verdad las mejoras visuales en los televisores nos hacen más felices? Este estudio de LG apunta sorprendentemente a que sí

Las tecnologías en televisores inteligentes mejoran constantemente, año tras año, añadiendo funcionalidades, características y mejoras en la calidad de imagen que nos permiten disfrutar de nuestras películas, series y programaciones favoritas.

Si somos de los que cambiamos de tele cada mucho tiempo probablemente notaremos con más intensidad todos estos cambios técnicos al concentrar más mejoras en nuestro nuevo aparato que si lo renovamos cada pocos años.

LG se ha propuesto en un reciente estudio comprobar hasta qué punto estas novedades y mejoras afectan en nuestra percepción de los contenidos y niveles de satisfacción, y para ello han llevado a cabo un curioso análisis en el que han puesto a prueba dos televisores con 6 años de diferencia (no han especificado los modelos concretos), un LED de 2013 y otro OLED de 2019.

¿Por qué 6 años? Porque estiman es el tiempo medio en el que los consumidores del Reino Unido (lugar donde se ha llevado a cabo el estudio) renuevan su parque de televisores. Para las pruebas han contado con dos gemelos, cada uno de los cuales ha sido llevado a una sala diferente con uno de los televisores antes mencionados.

Allí se les puso el episodio ‘The Battle of the Bastards’ de Juego de Tronos y se analizó y evaluó su expresión facial durante la visualización para determinar mediante un análisis posterior de estos gestos los niveles de satisfacción y felicidad de cada uno de los sujetos, como podemos ver en el siguiente vídeo.

¿El resultado? Pues según concluyen los responsables de la prueba, el gemelo que vio la serie en la tele OLED con más calidad de imagen obtuvo 27 "picos emocionales" frente a los 4 de su hermano y un 15% más de experiencia emocional positiva solo por el hecho de usar un televisor más moderno y con mejor imagen.

¿Hay que tomarse este estudio en serio? Pues parece más bien una prueba con fines publicitarios que un sesudo análisis estadístico en el que se hayan utilizado múltiples sujetos de prueba y control. No obstante, hay que reconocer que si no estamos acostumbrados a una nueva "calidad técnica" somos más susceptibles de sufrir el efecto "WOW" las primeras veces que probamos un nuevo dispositivo, algo a lo que por cierto también acabamos acostumbrándonos con el paso del tiempo.

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