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Cargar el lavavajillas Samsung tiene su truco: consejos para hacerlo mejor

La forma en que colocas los platos y cubiertos en tu lavavajillas Samsung puede marcar la diferencia en la limpieza y el cuidado de tu vajilla

La gran ventaja de tener en nuestra cocina un lavavajillas es la cantidad de trabajo que es capaz de aligerar. Pero para sacar todo el potencial de este electrodoméstico, hay que saber cómo colocar cada cosa en su lugar, haciendo que la efectividad sea máxima en todos los sentidos, no solo en la limpieza de platos, vasos, cubiertos y demás, sino también en el gasto de agua y el buen funcionamiento del dispositivo.

Para lograr la mayor eficiencia es aconsejable seguir una serie de consejos para cargar el lavavajillas Samsung. Sabiendo cómo llenar la cesta superior e inferior, todo será más fácil y funcional.

La cesta superior del lavavajillas

Como es normal, lo primero que debemos tener claro es la distribución de la cesta, por lo que hay que adaptarse, aunque en la mayoría de los lavavajillas Samsung es muy parecida.

Los elementos que se recomienda colocar en la cesta superior son los siguientes:

  • Vasos y copas.
  • Tazas.
  • Recipientes de plástico y sus tapas.
  • Platos preferiblemente pequeños.
  • Ciertos utensilios (espumaderas, cucharones, tenedores de cocina, pinzas…)
  • Cubiertos (si el lavavajillas tiene un cesto para ello).

Lo normal es colocar los vasos, tazas, copas y demás boca abajo, preferiblemente en los laterales, aunque si hay muchos, se deben distribuir como se pueda. Los platos pequeños, si es posible, mejor ponerlos también en esta bandeja.

Por último, los utensilios como espumaderas o tenedores de madera para cocinar podrán ir en los laterales si tienen un lugar específico o entre los vasos si no es así. Los cubiertos podrían ir aquí si hubiera cesta para ello, recordando que las cucharas, cucharillas y tenedores hay que colocarlos hacia arriba, mientras que  los cuchillos se deben situar hacia abajo.

La cesta inferior del lavavajillas

En la cesta inferior es donde pondremos todo lo que sea más grande y voluminoso, no siendo recomendable colocar elementos de plástico, ya que aquí se encuentra el calefactor del lavavajillas, lo que podría provocar deformaciones en este material.

Aquellos elementos que deberían estar en la cesta inferior son:

  • Boles de tamaños medio o grande.
  • Platos de todo tipo, desde pequeños hasta grandes u hondos.
  • Todo tipo de fuentes.
  • Sartenes.
  • Ollas.
  • Bandejas, incluso las del horno.
  • Cubiertos, siempre y cuando el departamento para ellos esté en esta cesta.

Lo más aconsejable es orientar los elementos más sucios hacia el centro, dejando suficiente espacio para que se consigan lavar por todas las partes. Un buen truco puede ser el de alternar piezas de diferentes tamaños.

Todos los elementos que sean de mayor tamaño deberían ir en la parte posterior, con las bandejas en los lados para un mejor lavado y los platos en los departamentos habilitados para colocarlos. Si existen huecos, se puede ir completando con lo que veamos que nos va entrando.

Los cubiertos en su cesta, con las cucharas y tenedores colocados hacia arriba, mientras que los cuchillos deben tener la parte cortante hacia abajo.

Si el lavavajillas en vez de cesta tiene una rejilla para colocar los cubiertos, tendrás que utilizarla tal y como marcan los propios enganches.

Una vez lleno el lavavajillas

Cuando el dispositivo ya tiene todo lo que vas a lavar y está lleno tanto la cesta superior como la inferior, entonces debes fijarte de ciertos detalles.

  • Asegúrate de que los brazos giratorios pueden moverse sin ningún problema y que no golpean en nada.
  • Llena el lavavajillas, pero nada que sea exagerado, puesto que si está excesivamente aprovechado, la limpieza no será correcta.
  • Una vez haya finalizado el ciclo de limpieza, espera unos cinco minutos y abre ligeramente la puerta para que salga el vapor y así evitar malos olores.
  • En cuanto recojas toda la vajilla lavada, comprueba que no ha quedado ningún residuo en el fondo del lavavajillas.
  • Después de eso, es conveniente comprobar y limpiar el filtro del lavavajillas y el Sensor de suciedad, algo que tienen los dispositivos modernos y que suele fallar por obstruirse por grasa o residuos. Revisa en el manual de tu lavavajillas Samsung dónde está, aunque normalmente se sitúa en el interior de la zona del filtro.

Al cargar correctamente tu lavavajillas Samsung, no solo ahorrarás tiempo y esfuerzo, sino que también contribuirás al cuidado del medioambiente, reduciendo el consumo de agua y energía.

Imágenes | Bing Creator, Xataka

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