Uno de los problemas de los objetos fabricados con impresoras 3D es su acabado final. No es todo lo fino que nos gustaría, quedando en ocasiones un tanto tosco y poco agradable al tacto. PolySmooth quiere resolver este problema con su sistema de pulido, que consta de dos partes o componentes.
En primer lugar tenemos el material de impresión especial conocido como PVB, compatible con las impresoras 3D actuales que trabajan con extrusoras PLA, pero que tiene la particularidad de que se puede pulir en presencia de alcoholes como el etanol.
Gracias a esta propiedad funciona la segunda parte del invento, una máquina pulidora en cuyo interior insertamos los objetos tras salir de la impresora y que por medio de un sistema de nebulización golpea la superficie de éstos con gotas de alcohol de 10 micras que van puliendo el objeto poco a poco durante un proceso que dura 7 minutos.
El espacio para alojar los objetos no es muy grande, ya que solo cuenta con un volumen de 15cm x 15cm x 18cm, pero los resultados, a juzgar por el vídeo de promoción y las fotos, parecen bastante espectaculares.
Precio y disponibilidad
PolySmooth está terminando su fase de financiación en Kickstarter, con bastante éxito por cierto, y esperan llegar al mercado a partir de octubre de este año por un precio de 249 dólares para la máquina pulidora con 750 gramos de filamento especial.
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