La Raspberry Pi Zero es un dispositivo genial. Más de cuatro meses después de su presentación sigue siendo prácticamente una odisea hacerse con una, ya que en cuanto aparecen unidades en las tiendas desaparecen como por arte de magia.
Con un tamaño mínimo y un consumo muy reducido podemos hacer grandes cosas con ella. Si hace poco hablábamos de este joystick, hoy os hablamos de una consola de un tamaño diminuto realizada con la Raspberry Pi Zero.
Tenéis todas las instrucciones en Thingiverse, incluyendo los archivos de la carcasa y los botones para ser fabricados con una impresora 3D. Esta pequeña maravilla mide 6,9 x 4,8 x 2,7 cm. En su interior corre Retropie Emulationstation, con lo que podremos jugar desde a juegos de Atari hasta clásicos de GBA, N64 y máquinas recreativas entre otras muchas consolas.
LA pantalla es un display OLED de 1,5 pulgadas de Adafruit, aunque si no queremos un tamaño tan pequeño siempre podemos recurrir a otros displays o incluso al oficial de la Raspberry Pi, o bien conectarla a una televisión por HDMI y jugar con un joystick conectado a su puerto USB cómodamente.
Eso si, la Raspberry Pi Zero no tiene salida de audio analógico y por tanto la consola no tiene audio, por lo que yo utilizaría un DAC o el DSP de Polyvection que vimos en esta entrada para tener sonido mediante auriculares.
El controlador está conectado a través de GPIO de la Raspberry Pi. Si no quieres complicarte pero estás deseando hacerte con una, su creador las vende por un precio de 250 dólares (las partes necesarias cuestan 140 dólares). Una pena que todas las piezas necesarias nos cuesten tanto si el corazón de la consola únicamente cuesta cinco dólares.
Más información | Thingiverse
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