A la hora de montar un sistema de sonido multicanal lo habitual es optar por un conjunto de altavoces más amplificador y colocar los bafles a nuestro alrededor o sobre nuestras cabezas para reproducir las pistas Dolby y DTS correspondientes.
Sin embargo, lo que hoy os traemos es un concepto completamente diferente, ya que trata de ofrecernos el sonido envolvente multicanal directamente desde el asiento, pero además sin usar altavoces.
Es el asiento FLEXOUND Pulse que funciona utilizando la tecnología FLEXOUND Augmented Audio, un sistema que deshecha los clásicos altavoces integrados en el cuerpo del asiento para desarrollar una innovación que permite hacer vibrar las diferentes estructuras, gomas y espumas de la silla para llevar así el sonido hasta nuestros cuerpos y oídos.
La idea es recrear un espacio sonoro personal, único para cada espectador, con 5.1 canales y capaz de acercarnos el audio hasta nuestro cuerpo, la piel y por supuesto al oído, aunque sin tener que emitir ondas sonoras de gran potencia por toda la habitación, por lo que en teoría podríamos tener varios de estos asientos en casa, escuchar nuestra peli favorita y no molestar a los vecinos.
Esto es posible porque una buena parte de la energía se transmite directamente a nuestros cuerpos, resaltando el impacto de los graves y ofreciendo unos medios y agudos más claros y con mayor presencia puesto que no se pierden por el camino.
Y, ¿cómo es posible enviar sonido a través de la espuma de los asientos? Pues según sus creadores ahí está la verdadera innovación del producto, que funciona en torno a una serie de superficies vibratorias capaces de crear, según afirman, un campo sonoro cercano a frecuencias de entre 20 Hz y 20 KHz.
FLEXOUND Pulse es el primer asiento que desarrollan (por supuesto no han dado precios) y aseguran que ya han captado el interés de las primeras salas de cine comerciales y que están trabajando para acercarlo a los hogares en la forma de sillas de oficina, para ver cine, juegos, realidad virtual, etc. Además, la tecnología también puede ser usada en automóviles, aviones, salas de espera, etc.
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