Qué hay que mirar para comprar una lavadora y asegurarnos de que tenga las tecnologías de los próximos años

Cada vez más inteligentes y conectadas, las lavadoras son ya equipos sofisticados que están añadiendo a las funciones de lavado y secado clásicas mejoras y avances de última generación para realizar la colada de forma más rápida y eficiente.

¿Estás pensando en comprar un nuevo modelo para tu hogar? A continuación vamos a hacer un repaso por las características más importantes en las que tienes que fijarte para que se adapte a tus necesidades y que no se te quede obsoleta en poco tiempo.

Características básicas

Lo primero que debemos considerar al comprar una lavadora es si la queremos de tipo integrada o independiente. Las primeras son ligeramente más compactas para poder encastrarlas dentro de los propios muebles de cocina, pudiendo incluso ponerles puertas a juego con el resto del mobiliario. Las independientes pueden servir tanto para montarlas en la cocina como para instalarlas en un lavadero o el baño teniendo una toma de agua corriente cerca.

En segundo lugar hemos de pensar si nos conviene un modelo de carga frontal o uno con carga superior. Las de carga frontal son las más comunes, con la típica apertura circular en la parte delantera de la estructura, aunque si andamos justos de espacio puede interesarnos una lavadora con carga superior, que suelen ser más estrechas, aunque el acceso al tambor desde arriba requiere que esa parte esté libre, por lo que no podremos colocarlas bajo la encimera de la cocina.

Uno de los parámetros más importantes es la capacidad de carga de la lavadora expresada por los fabricantes en kilogramos. Nos permite valorar cuánta ropa podremos lavar de una sola vez y saber si podremos introducir en el tambor prendas grandes como por ejemplo mantas voluminosas o edredones.

Apostar por modelos con mayor capacidad implica una mayor inversión inicial, pero también podremos ahorrar energía, detergente y agua al lavar toda la colada de una sola vez en lugar de tener que andar poniendo varias lavadoras. En general, para familias con hasta dos o tres miembros suele ser suficiente con cargas de 6 kilos, mientras que si somos familia numerosa probablemente nos convenga apostar por un modelo de 8, 9 o más kilos.

Otro de los parámetros esenciales a considerar es el tipo de interfaz de usuario que nos presenta la lavadora. Los modelos más sencillos ofrecen las típicas ruedas de control con grandes botones e indicadores luminosos para las funciones básicas. Sin embargo, los mas avanzados ya cuentan con pantallas LCD que muestran más información como el tiempo que queda para acabar el ciclo de lavado, el estado del detergente, el programa en uso, etc., e incluso podemos controlarlas desde el móvil como veremos más adelante.

Tipo de motor y eficiencia energética

El tipo de motor es también un punto importante a valorar. Los clásicos mecánicos han quedado un poco obsoletos en cuanto a prestaciones, aunque son los más económicos y podemos encontrarlos en modelos de gama media-baja. Sin embargo, en los últimos años se están incorporando cada vez con más frecuencia los motores eléctricos denominados Direct Drive, sin correas, poleas ni escobillas y que consisten básicamente en un rotor con imanes que mueven el tambor.

Son más silenciosos, eliminan partes mecánicas que tradicionalmente causan averías, incrementan así la duración de la máquina y en el caso de los que utilizan además la tecnología Inverter, mejoran la eficiencia y reducen el consumo eléctrico.

El motor será el encargado además de generar la velocidad de centrifugado óptima de la lavadora, parámetro que influirá en el precio de compra y en la capacidad del equipo para secar la colada. Se mide en revoluciones por minuto (rpm) y sirve para extraer el agua de los tejidos mediante el giro del tambor. Lo mínimo que suelen ofrecer los modelos actuales son unas 600 rpm, aunque la recomendación es apostar por modelos a partir de 1000 rpm, especialmente si vivimos en lugares con climas húmedos y no vamos a comprar una secadora aparte.

En cuanto a la eficiencia energética, la lavadora es uno de los electrodomésticos que más consumen en casa, por tener que calentar el agua y hacer girar una pesada carga. Los modelos más eficientes suelen ser más caros, pero reducen notablemente el consumo tanto de agua como de energía eléctrica.

Además, a partir de este año las ya clásicas etiquetas "A+", "A++" y "A+++" han sido sustituidas por los valores de "D", "C" y "B" respectivamente. Esto no significa que la calificación del electrodoméstico haya empeorado, sino que el nuevo etiquetado es más estricto y por el momento se deja la categoría "A" vacía a la espera de nuevos productos más eficientes que los actuales que llegarán en los próximos años.

El ruido es otro factor importante a tener en cuenta, especialmente si somos de poner a lavar la ropa por las noches. La etiqueta de eficiencia energética de cada modelo nos permite conocer este valor en decibelos, tanto en lavado como en centrifugado. Cuanto más bajo mejor, siendo recomendable que no sobrepase los 70-80 dB en el pico de centrifugado máximo.

Algunos modelos modernos cuentan además con sistema de limpieza a vapor de las prendas. El vapor se aplica durante diferentes momentos del ciclo, dependiendo del programa, para conseguir un mejor lavado y con menos arrugas, completando los programas de un modo más eficiente y dejando la ropa en mejores condiciones.

Lavadoras inteligentes, conectadas y con IA

En los últimos años la mayoría de fabricantes ha comenzado a dotar de cierta "inteligencia", o mejor dicho de conectividad, a sus lavadoras de gama alta. Esto nos permite gestionar y conocer desde una aplicación para móviles el estado del lavado, cuándo ha terminado, pausarlo o activarlo.

Algunos modelos admiten también programación de modo que podamos configurarlos para que se inicie el lavado en cierto momento del día de forma que por ejemplo termine justo cuando llegamos a casa. También hay equipos que ofrecen la posibilidad añadir nuevos programas de lavado posteriormente simplemente descargándolos desde el móvil.

Las lavadoras más avanzadas presumen además de contar con ciertas capacidades de inteligencia artificial (IA) que actúa sobre la mecánica de la máquina para ajustar en tiempo real la velocidad de giro, adaptar los ciclos de lavado al tipo y suciedad de la carga o por ejemplo dosificar automáticamente el detergente en función del nivel de suciedad de la ropa.

Son modelos más caros inicialmente, pero con el paso de los años este precio se compensa con el ahorro en detergente y electricidad. El uso de algoritmos de IA y una mecánica y electrónicas avanzadas permiten también reducir también los tiempos de lavado con funciones específicas que permiten cambios en los movimientos del tambor y la utilización de difusores de agua en espray.

Las lavadoras más modernas cuentan además con la capacidad para integrarse en el ecosistema conectado del hogar y ofrecen compatibilidad con Google Assistant y/o Alexa para pedirles que realicen ciertas tareas mediante comandos de voz o incluso visualizar el estado del equipo en un televisor compatible.

Por último, entre las funciones "inteligentes" de los modelos más avanzados podemos encontrar también la capacidad para controlar los parámetros de lavado, programas, temperatura o la cantidad de detergente de forma remota, incluso funciones de autodiagnóstico y mantenimiento que ofrecen información relativa al estado de la lavadora y sus componentes, informando de averías en algunas de sus piezas.

Modelos interesantes

LG F4WV3509S3W

La lavadora LG F4WV3509S3W ofrece unas prestaciones realmente avanzadas. Para empezar, cuenta con tecnología Inteligencia Artificial AI Direct Drive, por lo que es capaz de detectar de forma automática las características del tejido y de la carga. Además, en caso de avería, cuenta con servicio de autodiagnóstico. Y es capaz de eliminar el 99 % de los alérgenos. Cuesta 419,99 euros.

Whirlpool FFB 9638 BV

Subiendo en prestaciones tenemos a esta Whirlpool FFB 9638 BV, una lavadora de carga frontal con capacidad para 9 kilos, centrifugado de hasta 1600 rpm, tecnologías 6th sense, freshcare+ y steam refresh, con motor sense inverter, eficiencia energética D y un precio de 529 euros.

Miele WWD 660 TDos

Otro modelo de gama media-alta es este Miele WWD 660 TDos, con carga frontal para lavar hasta 8 kilos cada vez, centrifugado de 1400 rpm, sistema TwinDos de dosificación de detergente automática en dos fases y tambor en estructura de panal de abeja. Su precio ronda los 1099 euros.