Con el coste de la energía disparado en los últimos meses, no está demás cualquier ayuda a la hora de intentar abaratar la factura mensual, tanto de la luz como del gas. Y en este sentido, los termostatos de tadoº ofrecen una solución que sirve para predecir el consumo futuro analizando nuestro historial de uso.
Se trata de la función "Energy IQ", una opción que hasta ahora la marca estaba probando en un limitado número de usuarios y que ahora está extendiendo a más propietarios de sus termostatos con la consiguiente actualización de la aplicación.
Conocer la factura antes que llegue
tado° está ampliando el número de usuarios que pueden probar "Energy IQ", si bien lo que no ha cambiado es que sigue siendo necesario contar con la suscripción Auto-Assist por 2,99 euros/mes o 24,99 euros/año y además usar un termostato inteligente o un receptor inalámbrico.
Esta función lo que hace es facilitar a los usuarios un control de los gastos mensuales de calefacción y conocer con antelación cuanto van a gastar en función de sus hábitos de uso. Es una forma de mantener el presupuesto de la calefacción bajo control.
Esta función lo que hace es simular la lectura de los contadores de energía inteligentes para controlar el gasto en consumo de calefacción y así no tener la incertidumbre de a cuanto va a ascender la factura del próximo mes.
Energy IQ para todos los clientes de Auto-Assist hace que se pueda comparar el consumo de energía con el del año anterior. Los resultados se muestran en tiempo real y detallan lo que cuesta la calefacción, mostrando luego, a modo de gráfica, una simulación de lo que puede costar en un futuro y que de esta forma, el usuario pueda cambiar la tendencia estableciendo cambios en las temperaturas u otras modificaciones en su comportamiento.
De esta forma, Energy IQ permite a los usuarios ver el coste futuro de la calefacción y consumo de energía de forma transparente así como configurar temperaturas y funciones de ahorro de energía. Una función que se ayuda de la geolocalización, detección de ventanas abierta o adaptación climática como factores que intervienen en la factura.
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