Estamos en la era del Internet de las Cosas. El IoT ha ido calando en nuestras vidas sin prisa, pero sin pausa, desde que el término irrumpió en el panorama tecnológico en los años 80, convirtiéndose en tendencia clara en 2012, coincidiendo con la llegada de las redes de comunicaciones de alta velocidad. En el momento actual, aunque no se hable de un modo explícito de IoT, ya lo estamos usando en el día a día de un modo normal y cotidiano.
Los paneles solares o los puntos de carga para los vehículos eléctricos se instalan en ubicaciones que, hasta ahora, no precisaban de conectividad a Internet
El concepto de “dispositivos conectados” es el que manejamos en la actualidad. No es extraño que, cada vez que compramos o instalamos un gadget electrónico, electrodoméstico o equipamiento para el hogar, parte del proceso de instalación pase por conectarlos a Internet.
Hablamos de televisores, barras de sonido, neveras, lavadoras, enchufes, bombillas, altavoces inteligentes, cámaras de vigilancia o, ahora también, el equipamiento asociado a la carga del coche eléctrico o a las instalaciones fotovoltaicas que se están instalando en un número creciente de hogares, dentro del contexto del autoconsumo energético.
¿Internet en todos los rincones del hogar?
El reto al que se enfrentan los usuarios cuando tienen que conectar un nuevo dispositivo a Internet es, precisamente, el de disponer de una conexión de red robusta y estable allí donde estén ubicados. En las estancias de convivencia habitual del hogar, esta conectividad suele estar bien resuelta. Normalmente, el router está instalado en el salón, al tiempo que, si la casa es grande, se lleva la conectividad a otras estancias a través de repetidores wifi o dispositivos PLC.
Tienen que ser conexiones de red estables que garanticen que sea posible monitorizar remotamente el estado de la instalación de autoconsumo o el de la estación de carga del vehículo eléctrico
Sin embargo, las nuevas categorías de dispositivos conectados que entran en juego con la instalación de paneles solares en el hogar, o la de puntos de carga para los vehículos eléctricos, encuentran su lugar en ubicaciones que, hasta ahora, no precisaban de conectividad a Internet. Hablamos del tejado de las viviendas unifamiliares, que son las que se están beneficiando de la instalación de paneles solares, o del garaje, donde es más previsible encontrar el punto de carga de los coches eléctricos.
Llevar la conectividad de Internet a esas ubicaciones no es tan sencillo ni evidente como en las estancias de uso habitual. Están alejadas del router principal, y con muros y suelos de por medio, que hacen que la conectividad inalámbrica no llegue en buenas condiciones de intensidad y estabilidad.
Esos son, evidentemente, los dos retos: llevar Internet a ubicaciones que antes no necesitaban estar conectadas y, además, tienen que ser conexiones de red estables, que garanticen que los dispositivos estén permanentemente “hablando” con Internet para que sea posible monitorizar remotamente el estado de la instalación de autoconsumo o el de la estación de carga del vehículo eléctrico.
La solución: Internet a través de PLC
El uso de repetidores wifi para llevar conectividad a lugares como el sótano o la buhardilla no siempre es la más adecuada. ¿Por qué? Porque las paredes y los techos bloquean en gran medida la señal wifi. Por lo que es recomendable utilizar una conexión como Powerline, especialmente en casas unifamiliares, donde abundan los paneles solares en el tejado y los vehículos eléctricos se cargan en el garaje.
El punto fuerte de los dispositivos PLC es que llevan la conexión de Internet a todos los rincones de la casa a través de la instalación eléctrica. Cada enchufe de la casa se convierte en un potencial punto de acceso
La tecnología que ofrece mejores posibilidades para llevar Internet hasta este nuevo tipo de dispositivos conectados es la Power Line Communications o PLC. Fabricantes como devolo, sin ir más lejos, cuentan con una amplia experiencia en el desarrollo de este tipo de soluciones de conectividad y una cartera de productos extensa y adaptada a cada necesidad.
Su punto fuerte es que llevan la conexión de Internet a todos los rincones de la casa a través de la instalación eléctrica. De este modo, cada enchufe de la casa se convierte en un punto de acceso potencial para la conectividad de red sin más que instalar un PLC. Los dispositivos Magic 2 de devolo, además, no sacrifican la toma de corriente, al llevar su propio enchufe, contando también con conexiones Ethernet y conexión wifi, incluyendo la tecnología WiFi 6.
Despliegue rápido, seguro y sencillo
La instalación de una red doméstica empleando dispositivos PLC de devolo pasa por conectar el router, a través de un cable de red, a una de estas soluciones que, a su vez, está conectada a un enchufe cerca de dicho router. De este modo, se inyecta en el cableado eléctrico la conectividad de red, usando la tecnología de modulación G.hn, que permite velocidades de transmisión de hasta 2.400 Mbps. Hay que recordar que las velocidades de la fibra suelen ser de 300 Mbps – 500 Mbps, por lo que será posible, teóricamente, aprovechar las velocidades de Internet ofrecidas por los operadores.
Después, solo tendremos que instalar dispositivos PLC en aquellos enchufes que estén en las zonas donde queramos tener cobertura de red.
Para inyectar en el cableado eléctrico la conectividad de red, se usa la tecnología de modulación G.hn, que permite velocidades de transmisión de hasta 2.400 Mbps
La instalación eléctrica en el hogar recorre todas las estancias, desde el sótano hasta la buhardilla, por lo que la versatilidad es máxima. Además, es fácil instalar nuevos dispositivos PLC para extender la cobertura si la casa es especialmente grande y con varias plantas.
Las redes wifi creadas con los dispositivos de devolo, además, vienen con tecnologías asociadas a WiFi 6, que optimizan y automatizan apartados tan delicados como permitir que los dispositivos se conecten al punto de acceso óptimo en cada momento, o llevar el tráfico de Internet a múltiples dispositivos conectados al mismo tiempo.
La conexión de red, además, está encriptada, lo cual garantiza que nadie podrá obtener información en caso de potenciales hackeos a través de la instalación eléctrica.
Las soluciones PLC de devolo
El repertorio de soluciones PLC de devolo es amplio. Entre las más recientes, destaca la familia devolo Magic 2. Engloba, por una parte, las soluciones Magic 2 WiFi 6, Magic 2 WiFi next, que vienen en variantes Starter Kit, con dos adaptadores, y Multiroom Kit, con tres adaptadores y adaptadores complementarios; por otra, Magic 2 LAN triple, Magic 2 LAN y Magic 2 LAN DINrail. La solución Magic 2 LAN (triple y estándar) viene en variante Starter Kit con dos adaptadores y adaptadores complementarios.
La configuración de la red y la monitorización y actualización de los dispositivos PLC se lleva a cabo desde una aplicación diseñada a tal efecto, aunque no será necesario estar especialmente pendientes del funcionamiento de la red una vez haya sido instalada.
Las soluciones con cableado Ethernet exclusivamente serán adecuadas en casos concretos, como el de los inversores que llevan cuenta de la conversión de la electricidad generada por los paneles solares en corriente alterna compatible con la instalación eléctrica en el hogar. O el de los cargadores wall box para el vehículo eléctrico.
Para usos generalistas, los PLC con conexiones Ethernet y wifi serán los óptimos. Especialmente los WiFi 6, ahora que dispositivos tales como móviles, tabletas o PCya vienen de forma habitual con este tipo de conectividad.
Llevar Internet a todo el hogar es posible
Las ventajas derivadas del uso de dispositivos PLC frente a repetidores wifi se pone de manifiesto especialmente en viviendas unifamiliares de varias plantas. En estos casos, el número de repetidores wifi necesarios para cubrir todos los rincones del hogar aumentaría frente a los apartamentos o pisos de menos metros.
Además, empieza a ser habitual que se instalen o se plantee la instalación de paneles fotovoltaicos y/o cargadores para el vehículo eléctrico. Otros dispositivos, tales como calderas, sistemas de climatización o de videovigilancia, también son susceptibles de conectarse a Internet.
Estas infraestructuras suelen tener el centro de operaciones en el sótano de las casas, un lugar que, tradicionalmente, no ha necesitado de conexión de Internet alguna. Es una ubicación que, además, suele estar muy alejada del router de Internet, así que, usar la instalación eléctrica para llevar Internet al sótano (o donde sea preciso), se plantea como una solución óptima, tanto para los usuarios particulares, que busquen por ellos mismos la solución a esta necesidad, como para los instaladores que incluyan este tipo de conectividad como parte de su propuesta comercial, de modo que los clientes no tengan que preocuparse de nada.
Imágenes: devolo
