Roomba 790 vs Hom Bot Square. Comparativa de robots aspiradores

Que iRobot con sus Roombas es la marca líder en el mercado de los robots aspiradores creo que nadie lo pone en duda. Fueron los pioneros en ese campo, y eso ayuda, pero también han demostrado que son capaces de seguir innovando y mejorando sus productos. Sin embargo, no le faltan competidores, y uno de los que mejor le planta cara es el de LG. Así que vamos a ver una comparativa entre el Roomba 790 y el Hom Bot Square.

El modelo de Roomba con el que contamos para esta prueba es el más avanzado de todos, el Roomba 790, que cuenta como principal novedad un mando a distancia que es más bien un completo centro de control remoto. El Hom Bot Square es el que analizamos hace unos meses, el VR6260LV, y aunque las nuevas versiones incluirán algunas mejoras como el control a través del smartphone, y hay también una versión con mopa, en esencia son muy similares.

Diseño y tamaño

A la vista está que ambos robots aspiradores tienen un diseño cuidado y trabajado. El aspecto de la Roomba es un poco más sobrio y tosco, con buenos plásticos en los acabados, mientras que el Hom Bot Square destaca no sólo por su forma cuadrada con los bordes redondeados, sino porque tiene un acabado negro brillante que le confiere un punto más elegante, menos conservador, aunque puede que no sea gusto de todos.

En cuanto a tamaño, los dos son muy similares. La Roomba es unos milímetros más bajita que el Hom Bot Square, lo que le permitirá acceder bajo muebles que puede que el Hom Bot no llegue, aunque en la práctica veremos que este último es más precavido a la hora de no atascarse bajo ellos.

Cepillos y sistemas de limpieza

Si les damos la vuelta, vemos que la Roomba 790, como todas las Roomba, cuenta con dos cepillos principales y uno lateral, mientras que el Hom Bot Square cuenta con sólo un cepillo central de cedras y dos laterales especialmente largos. Esto le confiere a la Roomba una ventaja a la hora de aspirar y no dejarse partículas más grandes, mientras que el Hom Bot Square se declara experto en esquinas. Luego lo comprobaremos en las pruebas prácticas.

En ambos robots aspiradores es sencillo desmontar los cepillos para limpiarlos o sustituirlos. Un sistema de colores nos guía para saber qué piezas son las que podemos extraer y cómo debemos hacerlo. Es realmente intuitivo y sencillo realizar el mantenimiento cotidiano.

Depósitos

Una de las cosas que siempre me ha gustado del Hom Bot Square es que al depósito de suciedad se accede desde la parte superior de forma cómoda. El de la Roomba se extrae de la parte posterior del aparato, lo cual es un pelín más incomodo y además en modelos anteriores ocasionaba que se derramara un poco de suciedad al sacarlo, algo que han solucionado con una sencilla pestaña que evita que se salga la suciedad.

Los dos depósitos cuentan también con filtros HEPA que se pueden desmontar fácilmente, lavar y sustituir si así lo deseamos. Un punto a favor para ambos. Sin embargo, en cuanto a capacidad, los dos se quedan un poco cortos. Quizás el de la Roomba admita algunos mililitros más de volumen, pero ambos rondan los 350ml, por lo que hay que vaciarlos con frecuencia. Eso sí, la Roomba cuenta con un sensor de depósito lleno que nos avisa de cuando vaciarlo.

Mandos a distancia

Tanto la Roomba 790 como el Hom Bot Square cuentan con mandos a distancia. El de la Roomba 790 es todo un centro de control con indicadores LED y un pad para controlar el robot, mientras que el del Hom Bot es más pequeño y manejable, con las mismas funciones pero sin panel LED.

La ventaja del mando del Hom Bot es que es pequeño, y solo usa dos pilas AAA que duran una eternidad, mientras que el centro de control remoto de la Roomba es un pelín grande, hay que cogerlo con las dos manos y devora cuatro pilas AA que hay que sustituir con frecuencia si lo usamos. Aún así, en ambos casos, no es algo que se use con frecuencia, ya que lo normal es acercarte a la base y darle a Start o Clean.

Bases de carga

Antes de poner a rodar y limpiar a nuestros queridos robots aspiradores, haremos una parada para comparar las bases de carga. No es algo muy importante, pero del Hom Bot Square me gusta que su base de carga sea más grande y estable, ya que así evita que al ir a buscarla, el robot la mueva de su sitio por error, aunque tampoco es algo que ocurra en exceso con la Roomba.

Prueba de limpieza

Aunque luego haré una valoración personal y os explicaré un poco cómo limpia cada uno de los robots, soy también un hombre de ciencia, y no hay nada como una prueba empírica para ver la efectividad de los robots aspiradores.

Básicamente, voy a disponer 100 gramos de pan rallado por mi casa, desde sitios que deberían limpiar seguro, como el centro del salón o zonas de paso, hasta sitios más complicados como debajo de un aparador, un sofá, la mesita de centro o debajo de la mesa del comedor, entre las sillas, así como en varias esquinas, a ver cuánto recoge cada uno y qué se dejan por limpiar. Obviamente pondré la misma cantidad de pan en los mismos sitios para cada prueba.

La Roomba 790 consiguió recoger 65 de los 100 gramos dispuestos, consiguiendo limpiar debajo del aparador, de la mesita de centro, del sofá y bastante entre las sillas del comedor. Sin embargo, se dejó mucho en zonas centrales y ni se acercó a los bordes y esquinas que había dispuesto. Todo en poco menos de 30 minutos.

El Hom Bot Square ha logrado recoger también 65 gramos, pero de una forma diferente. No se ha dejado ninguna zona sin pasar, salvo debajo de la mesita de centro y el sofá, donde su altura y precaución no le permite pasar (aunque cabe), y ha llegado a todas las esquinas. Sin embargo, su menor capacidad de aspirado --solo tiene un cepillo-- ha hecho que se deje algo de pan allí por donde sí ha pasado, algo que la Roomba evita gracias a su sensor Dirt Detect, que le hace limpiar más a fondo una zona cuando detecta suciedad acumulada.

Patrones de limpieza y habilidad para sortear obstáculos

Aunque tanto la Roomba 790 como el Hom Bot Square son robots aspiradores, tienen un comportamiento bastante diferente en cuanto a patrones de limpieza y habilidad para sortear obstáculos. Así, mientras la Roomba tiene un patrón un tanto caótico y poco comprensible para el ojo humano, el Hom Bot sigue un patrón en zig zag que va recorriendo la casa de forma bastante ordenada.

Esto no significa nada si al final acaban pasando por todos los rincones de la casa, pero mi impresión es que el patrón aleatorio de la Roomba le hace dejarse zonas por aspirar, y así lo han constatado las pruebas. Por contra, la precaución del Hom Bot Square para no atascarse bajo los muebles hace no entre a aspirar en sitios donde realmente sí cabe.

Claro que este pequeño hándicap de la precaución se convierte en virtud cuando comprobamos que el Hom Bot Square rara vez se choca con nada. Mientras escribo estas líneas está aspirando la Roomba, y cada dos por tres estoy oyendo cómo se golpea contra algo. Sin embargo, antes he tenido al Hom Bot dando vueltas, y entre que es más silencioso y no se choca con nada, solo me he acordado de que lo había puesto cuando me ha avisado de que había acabado y volvía a la base de carga.

Otro punto importante es la facilidad de cada robot aspirador para quedarse atascado en algún sitio o con algún objeto. Como he comentado, el Hom Bot es bastante inmune a todo tipo de obstáculos gracias a su precaución innata, sólo se ha trabado con el escalón de 2cm que hay para acceder a mi baño o con algún calcetín que obstruía una rueda o el cepillo.

A la Roomba, además de sufrir los mismos percances, la he tenido que rescatar de las patas de mi sillón Poang o mi tendedero, de debajo de mi vestidor porque se queda atascada bajo la balda inferior... en fin, que tengo que adaptar mucho más la casa para que vuelva sana y salva tras una ronda de limpieza, lo cual para mi es un poco engorroso.

Batería y accesorios

No he querido dedicarle una sección entera a la batería porque ambos robots cumplen perfectamente su misión en este aspecto. Son capaces de limpiar mi casa entera (uno 60m2) sin que la batería baje siquiera del 50%, así que imagino que podrán fácilmente con un piso de 100m2.

En cuanto a los accesorios, la Roomba 790 viene cargada de ellos, con un maletín con dos juegos completos de cepillos centrales de recambio, tres cepillos laterales y tres Virtual Wall para delimitar la zona donde queremos que limpie.

El Hom Bot Square solo viene con unos accesorios de limpieza y no tiene Virtual Wall similar, aunque podemos delimitar la zona en la que queremos que limpie gracias al mando a distancia. Eso sí, hay que tener en cuenta que la Roomba 790 cuesta casi 200 euros más, pudiéndose encontrar por unos 650 euros, mientras que el Hom Bot Square se puede adquirir fácilmente por 450 euros o menos.

Conclusiones

De forma resumida, podría concluir esta comparativa entre la Roomba 790 y el Hom Bot Square de LG afirmando que la Roomba es una aspiradora mejor diseñada gracias a su doble cepillo, mientras que el Hom Bot Square es mejor robot, gracias a su cámara superior y su sistema de guiado, y que cada uno debería elegir uno u otro en función de sus necesidades.

En mi caso, por ejemplo, prefiero un robot más autónomo como el Hom Bot Square, que no lo tenga que vigilar o que tenga que adaptar mi casa para él, a cambio de que se deje algo por aspirar o que no llegue bajo ciertos muebles. Sin embargo, entiendo que habrá quien prefiera la mayor eficiencia y potencia de limpieza de la Roomba (aunque al fin y al cabo los dos han recogido la misma cantidad de pan) a cambio de un poco más de ruido y un sistema de guiado que implica algún golpe que otro.

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