Desde hace ya varios años nos hemos acostumbrado a manejar sistemas de iluminación LED que nos han traído innumerables ventajas con respecto a las antiguas bombillas incandescentes e incluso con respecto a los fluorescentes y otras tecnologías de bajo consumo.
Sin embargo, la ciencia avanza y a los actuales LED les está saliendo un nuevo competidor en la forma de futuristas sistemas basados en paneles OLED. Sí, OLED quiere dar una vez más el salto más allá de las pantallas de los televisores y móviles para iluminar nuestras viviendas. ¿Qué tiene que ofrecernos para resultar tan atractivo?
OLED como base del hogar moderno
Los paneles OLED (Organic Light Emitting Diode) están formados por materiales orgánicos capaces de emitir luz por ello mismos y logrando nuevas cotas de delgadez, flexibilidad y potencia luminosa impensable hace años. No es simplemente una evolución de los actuales LED, ya que su capacidad para autoiluminarse de forma individual y sin necesidad de tener un sistema de retroiluminación le confiere propiedades impensables hace poco.
Las aplicaciones prácticas de esta tecnología están llegando en forma de nuevos tipos de muebles para el hogar con pantallas integradas, electrodomésticos con panales OLED que muestran informaciones, frigoríficos con puertas semitransparentes, espejos inteligentes o ventanas que superponen datos del tiempo o las noticias.
Pero también con tejidos inteligentes que incorporan algún tipo de sistema OLED como fuente de iluminación y dentro de poco no resultará extraño ver lámparas con bombillas, o mejor dicho, paneles OLED como fuente de luz principal. ¿En qué mejora a las actuales lámparas y luces LED?
Eficiencia, calor y delgadez
La principal baza de OLED para entrar por la puerta grande en nuestros hogares es la extrema delgadez con la que es posible construir los paneles luminosos. En las diferentes ferias y demostraciones de los fabricantes se habla siempre de que es posible alcanzar el grosor de un papel (de los gordos, eso sí), lo que da lugar a nuevas posibilidades.
La más inmediata es la opción de crear luces flexibles e incluso que se puedan doblar en ciertos ángulos sin estropearse. Es algo que ya hemos visto con los modelos de OLEDWorks o de Luflex que en este último caso incluso prometen ser capaces de vibrar para producir sonidos como si de una membrana de altavoz se tratase.
A esta cualidad hay que sumarle la mejora en la eficiencia logrando unas luces que nos ayudarán a ahorrar aún más en casa. Los actuales modelos trabajan con cifras de entre 50 y 80 lúmenes por vatio, pero en el próximo año se espera llegar a los 100 lúmenes por vatio y sobrepasar esta cantidad en los próximos dos o tres años.
Además, la durabilidad también sufrirá mejoras. Al no producir prácticamente calor residual (menos de 35-40 grados centígrados), los componentes de las lámparas duran más, no necesitan disipadores y a pesar de usarse elementos orgánicos se habla de poder superar las 50.000 horas de vida útil en estos elementos de iluminación OLED.
Luz más natural y "beneficiosa"
Otra de las características que suelen destacar los fabricantes es que las luces OLED ofrecen una gama de colores más natural con una respuesta espectral más uniformemente distribuida y sin defectos extraños.
El resultado es una luz mas natural y cercana a la producida por el Sol que sin embargo no viene acompañada de energía en la gama de los ultravioletas ni cuenta con la denominada "luz azul" que se supone perjudicial a la hora de conciliar el sueño.
Al proceder de una única superficie plana, sin disipadores ni otros elementos, no hay brillos, halos ni sombras extrañas que perjudican la calidad de la luz y que teóricamente molestan al usuario.
Una promesa todavía por cumplir
Como hemos visto, las posibilidades de las nuevas luces OLED para iluminar nuestros hogares parecen impresionantes y probablemente supondrán una revolución... cuando lleguen a nuestras manos. El problema por el momento es que no es una tecnología barata y como suele ser habitual en todos los sectores, por ahora está en fase de hacerse hueco en el mercado.
Los primeros productos comerciales ya están llegando a las ferias, incluso hay empresas como Ikea que han mostrado interés en el tema con algún producto que ha sacado a nivel local. ¿Cuándo llegarán las lámparas y luces OLED a todos los hogares?
Pues se espera que el mercado comience a despegar hacia el 2021-2025, por lo que todavía nos tocará esperar unos añitos o pagar el sobrecoste de los primeros modelos que irán desembarcando en las tiendas.
Más información | LGOLEDlight
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