La mayoría de televisores modernos cuentan con el denominado "modo juego", una configuración específica que desconecta el postprocesado de imagen y trata de minimizar en todo o posible el input lag o retardo con respecto a las órdenes del usuario para tener un juego más fluido.
Sin embargo, es un modo que hasta ahora teníamos que seleccionar manualmente cada vez que quisiésemos echar una partida, teniendo que volver más tarde a uno de los modos de calibración convencionales si queríamos ver programación tradicional en el televisor. Y decimos hasta ahora porque parece que tanto los fabricantes de pantallas como de consolas están dispuestos a que el proceso sea automático.
Hace unos días Samsung anunciaba su nueva gama media de televisores y una de las funcionalidades que llegarían como novedad este año era la de seleccionar automáticamente el modo juego en sus entradas HDMI cuando detectara una consola.
Ahora ha sido Microsoft la que ha señalado la llegada de este cambio a su consola Xbox One, que, si se conecta a un televisor compatible, como los Samsung antes mencionados, será capaz de activar el modo de baja latencia de la tele antes de empezar la partida, una función que estará presente en el futuro HDMI 2.1 pero que parece también se puede implementar ya usando los actuales conectores. Para ello tanto el televisor como la consola podrán comunicarse entre sí e invocar este "modo juego" solo cuando sea necesario.
La mejora llegará en forma de actualización a la Xbox One a lo largo de este año 2018 (no se ha señalado una fecha concreta), acompañada de otras como por ejemplo las tasas de refresco variables en la Xbox One S y One X en pantallas que soporten AMD Freesync.
Vía | Xbox
