Una de las ventajas que ofrece el Google Chromecast es la posibilidad de ver todo el contenido del móvil en el televisor. Desde los últimos vídeos de las vacaciones, fotos, música, algunas aplicaciones, duplicar pantalla... pero tiene un pero: dependes de una red Wi-Fi. ¿Y si no tienes Wi-Fi en casa? Pues aún así, podrás usar un Chromecast.
Y apunta, porque estos son los pasos necesarios para usar un Chromecast aunque en tu casa no tengas un router que te ofrezca conexión Wi-Fi ni conexión a la red. Sólo vas a necesitar dos móviles y algunas consideraciones previas, puesto que parte del tráfico, según lo que uses, se basará en tu tarifa de datos.
Dos móviles, un Chromecast y una conexión
El secreto para evitar esta limitación es usar el móvil como elemento para suministrar una conexión a la red en el Chromecast. Será el móvil el que "haga de router" y funcione como punto Wi-Fi.
En ese punto debes conectar el Google Chromecast a un HDMI libre de la tele y alimentarlo con la corriente. Con el móvil primario (es el que usarás para crear la red y conectarte) debes acceder a los ajustes generales y buscar en conexiones el apartado que te permita crear una zona Wi-Fi o punto de acceso, algo que puede variar en función de la marca del móvil.
Generas entonces una red, con un nombre y una clave y la activas, puesto que esa será la red a la que vas a conectarte. Por eso es importante que tengas en cuenta que usarás la tarifa de datos de ese segundo móvil.
Desde el otro móvil, lo llamaremos secundario, debes hacer es descargar la aplicación Google Home en tu móvil, da igual que sea un modelo basado en Android o un iPhone.
Ahora debes conectar el Chromecast a la red Wi-Fi. Abre la app Google Home y pulsa en el icono de "+" que aparece en la zona superior de la pantalla, en la zona izquierda y selecciona "Configurar dispositivo".
Luego debes pulsar en "Configurar dispositivo nuevo", elige tu casa y ve a "Siguiente" para encontrar el Chromecast al que te quieres conectar. Debes pulsar sobre el y teclear el código que aparecerá en la tele.
En el Chromecast debes seleccionar la red Wi-Fi que habías creado a modo de punto de acceso, como explican los compañeros de Xataka y como si fuese el Wi-Fi normal, solo que ahora es la creada con el segundo móvil y ya habrás terminado el proceso. En ese punto puedes desconectar el otro teléfono de la red Wi-Fi porque ya no te hará falta.
Desde ese momento, para usar el Google Chromecast sólo debes activar el punto de acceso de tu móvil y verás como aparece el icono de compartir con el Chromecast en las aplicaciones compatibles para compartir contenido con la tele o duplicar la pantalla.
La única precaución es tener en cuenta que todos los datos consumidos vía streaming con apps como Netflix, Disney+, YouTube... tiran de tu tarifa de datos. Esto no ocurre al compartir la pantalla de tu móvil, puesto que no consume datos Internet.
