Hace tiempo dimos una serie de consejos para sobrevivir al calor estival en verano en caso de no tener aire acondicionado. Puede que tu tengas uno y pienses que esos consejos no te son de toda utilidad. Pero no desesperes, pues también vamos a descolgarnos con una serie de consejos pensados para reducir el coste de tu factura de la luz, algo especialmente útil tras la nueva forma de tarificar que ha entrado en vigor en junio.
Se trata de buscar que la incidencia del uso del aire acondicionado sea lo menos intrusiva posible dentro de la factura de la luz. Son sólo una serie de consejos pero cuya aplicación suele estar más que consensuada por la generalidad de la sociedad y su rendimiento está más que comprobado.
Buscar aparatos eficientes
La etiqueta de la eficiencia energética está a la orden del día. Sí, es esa con la que seguro te has topado cuando has ido a comprar una nevera, una lavadora, una caldera o como en este caso, un sistema de climatización vía aire acondicionado.
Una clasificación que determina si un aparato es más o menos eficiente a la hora de producir frío y que hasta marzo de 2021 estaba encabezada por los modelos A+++ o en su defecto A++, aunque ahora las etiquetas han cambiado desapareciendo estas clases "A+", "A++" y "A+++" y siendo sustituidas por valores de "B", "C" y "D" respectivamente.
Pasar de una categoría de menor eficiencia energética a otra mayor puede suponer un ahorro de hasta el 40% en la factura de la luz. Cuidemos las frigorías y potencia, que sean las adecuadas a la estancia, pero también el consumo y de paso la contaminación acústica.
Buscar aparatos con modo ECO
Todas las marcas de aparatos de aire acondicionado tienen diferentes modos ECO, una función que nos permite ahorrar energía pero que puede variar de forma considerable de un modelo a otro. Se trata de un modo que permite un ajuste automático de la potencia mediante una elevación de la temperatura en el modo de enfriamiento.
Para ello se puede servir de un sistema de palas que giran u oscilan de forma automática para facilitar la distribución del aire por toda la estancia y así proporcionar una sensación térmica refrescante. Pero tenemos que remarcar que no todos los aparatos tienen el mismo modo ECO y este puede variar en función del modelo y del tamaño si bien los aspectos básicos son los mismos.
Mantener una temperatura media constate
Seguro que en más de una ocasión has oído que lo mejor es mantener una temperatura constante en verano que se sitúa en torno a los 22 grados. Una idea que ya puedes estar olvidando, pues lo aconsejable, cómo así determina el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía), es mantener el termostato a 26 ºC y que el cuerpo se adapte a la temperatura estival, vistiendo ropa acorde al momento y sin sufrir cambios de temperatura bruscos.
Mantener los equipos a punto
Es una de las tareas que obligadamente tenemos que llevar a cabo cada verano antes de empezar a usar los sistemas de aire acondicionado. Se trata de revisar los equipos, pero sólo aquello que está bajo nuestro control y no es otro apartado que el de los filtros.
Debemos tener en cuenta que hay que limpiar nuestros equipos de vez en cuando ya que además es algo muy sencillo de llevar a cabo. Una limpieza de filtros sobre todo, la parte del mismo encargada de retener y filtrar las partículas de polvo, las esporas de moho y otros organismos que son perjudiciales para la salud y que flotan en el aire del hogar.
Buscar una buena ubicación
Aquí un matiz y es que si antes los aires y calefacciones se solían situar junto a las ventanas, esto ahora no es primordial. Antes el motivo era el mal ajuste de las primeras, por lo que un aire o calefactor junto a las mismas hacía de cortina para evitar que el calor o el frío se fugase de casa.
Con los modernos cierres de PVC o aluminio, térmicos, con gas argón, podemos situar el sistema de aire en cualquier lugar de la casa, algo de mucha más utilidad si no es integrado y se trata de un aire tipo _split_. Se trata de ubicar la zona de la habitación que permita una buena climatización y que a la vez no nos incida directamente a nosotros (por salud más que nada).
Son sólo unos consejos que podemos tener en cuenta si vamos a instalar o si ya lo tenemos, al usar en casa un sistema de climatización vía aire acondicionado. Unos pasos que de seguirlos pueden servir para ahorrar unos euros en la factura de la luz, algo a tener en cuenta en los tiempos que corren.
En Xataka Smart Home | Llega el verano y antes de usar el aire acondicionado debes limpiar los filtros ¿sabes cómo hacerlo?